Según el establecimiento, libros no se adecuan a sus programas de enseñanza.
Ministra Mónica Jiménez sostuvo que las obras que sobren serán repartidos en bibliotecas públicas.
Uno de los 10 establecimientos en la Región Metropolitana que devolvieron textos escolares entregados por el Ministerio de Educación justificó su decisión de rechazar el material y pedir sus propios libros de editoriales específicas.
En el colegio La Concepción de La Florida se alegó que el material entregado por el gobierno no es el mejor para conseguir los resultados propuestos en su programa de enseñanza.
Alejandro Concha, director del establecimiento, sostuvo que "el desfase, la demora y la cantidad nunca cubrían las necesidades que necesitamos", y negó que existan vínculos del colegio con editoriales.
No obstante, Concha indicó que de recibir a tiempo los textos entregados por el ministerio, la situación podría ser estudiada por el consejo escolar para tomar determinaciones sobre el tema para el próximo año.
Por su parte, la ministra Mónica Jiménez sostuvo que algunos establecimientos que habían rechazado los textos están evaluando recibir el material y precisó que los libros que sobren serán repartidos en las bibliotecas públicas y que nada quedará en bodega.
La secretaria de Estado se reunió con miembros de la comisión de Educación del Senado para informarles a los parlamentarios Ricardo Núñez y Carlos Cantero sobre la calidad de los libros entregados.
Durante marzo, cerca de 16 millones de libros están destinados a repartirse entre los estudiantes chilenos, y según Jiménez, esta ayuda pretende ser un alivio para los bolsillos de los apoderados en tiempos de crisis.
