El presidente del Partido Socialista, Osvaldo Andrade, cree que el escándalo desatado por el préstamo de 10 millones de dólares que otorgó el Banco de Chile a la empresa Caval, propiedad de la nuera de Michelle Bachelet -episodio que provocó la renuncia de Sebastián Dávalos-, va a traer costos políticos para el Gobierno, pero no así para la Mandataria.
Andrade dijo a Cooperativa que no cree que la polémica haya "ensuciado" la imagen de Bachelet, puesto que ella no estaba enterada de los negocios de su hijo y su esposa, pero piensa que el caso sí afecta el discurso de La Moneda.
"Cuando la matriz, la impronta, el sello de este Gobierno es la lucha contra la desigualdad y el abuso, y toda nuestra actuación tiene esa connotación, ese objetivo básico ético que le da sentido a la propuesta presidencial, estas cosas evidentemente no ayudan en eso. En consecuencia, yo creo que alguna cuenta se nos va a pasar en el futuro sobre esto. Eso es inevitable", dijo Andrade a El Diario de Cooperativa.
Para el timonel, que el hijo de la Mandataria se haya reunido personalmente con Andrónico Luksic para gestionar el crédito fue "un error político, sin lugar a dudas".
"Esto no es un problema de prudencia, no seamos tan cuidadosos", señaló el diputado aludiendo a las declaraciones de Dávalos -quien milita en el PS- el fin de semana, tras su salida del Gobierno.
"Éste fue un tremendo error político. Así de claro. Esa simpleza de decir que esto fue una reunión entre privados es un error. ¿Cómo va a ser una reunión entre privados cuando hay involucrada una persona que tiene una alta connotación pública, querámoslo o no? Éste no es un problema de buenas o malas intenciones. Yo no tengo ninguna duda de la buena intención de Sebastián Dávalos, pero los hechos son los hechos. En consecuencia, participar en una reunión de ese tipo fue un error político", argumentó.
Para Andrade, la salida de Dávalos desde la Dirección Sociocultural de la Presidencia "cierra un capítulo que fue amargo, desafortunado". (Foto: UNO)
Andrade aclaró que si bien tiene "un reproche político-ético" ante la actuación del hijo de la Mandataria, no ve "ninguna irregularidad" desde el punto de vista legal: "No tengo ninguna razón para estimar que hay alguna infracción a alguna norma. Ahora, si la Alianza (...) estima que hay que recurrir a alguna institución o algún organismo, que lo haga. El Partido Socialista en el caso Penta presentó su querella y vaya que fue una decisión política adecuada. Yo creo que la Alianza debiera intentar hacer lo mismo: recurrir ante quien estime para acreditar lo que ellos entienden que podría ser", señaló.
En la derecha "debieran haberse querellado también en el caso Penta. Se lo sugerí a la UDI en su momento, pero pareciera ser que cuando se trata de sus propios compinches no hay esa misma voluntad", comentó el parlamentario, insistiendo en que si se acusa tráfico de influencias o uso de información privilegiada eso "debe acreditarse".
"Que lo acrediten quienes lo señalan (...) Si algunos están en condiciones de probarlo, bienvenido sea", señaló.
Lenta reacción permitió "que saliera una jauría"
Para Osvaldo Andrade, la renuncia de Dávalos a la Dirección Sociocultural de la Presidencia, "desde el punto de vista del Gobierno y de los partidos del Gobierno pone un broche respecto a esta situación".
"Cierra un capítulo que fue un capítulo amargo, desafortunado", señaló, advirtiendo que, en su opinión, "debiera haberse actuado con mayor celeridad".
"La semana (de permanencia) fue un plazo que pudo haber acortado (...) La demora permitió que una jauría saliera a decir todo tipo de cosas, incluso contra la propia Presidente, lo que me parece una canallada (...) Desde el momento en que se supo la participación de Dávalos en la reunión con el vicepresidente del Banco de Chile debió haberse tomado una decisión. Ésa es mi opinión, pero quiero ser sincero también: es re fácil decir estas cosas cuando se está desde lejos, más aun desde la comodidad de una clínica (...) Es re fácil ser general después de la guerra", dijo el timonel, quien se encuentra "convaleciente de una intervención quirúrgica".
Consultado por las palabras de Gonzalo Martner, quien se declaró partidario de llevar la situación de Sebastián Dávalos ante el Tribunal Supremo del Partido Socialista, el timonel señaló que "están ejerciendo un derecho".
"Si hay algún militante o varios militantes que quieren hacer una presentación en ese sentido, lo pueden hacer y yo los invito a que lo hagan", señaló.
