La intérprete de "Army of me" dejó a un lado sus intereses políticos y señaló que la preocupación por el Medio Ambiente ya no es un tema de hippies, "sino algo que interesa a todo el mundo".
La cantante islandesa Björk confesó que se ha abstenido hasta ahora de participar en la política en su país, y aseguró que actualmente está más en la onda ecologista.
"Los políticos han sido siempre para mí gente que se da a sí misma mucha importancia, pero sin relación alguna con lo que realmente me interesa", explicó en declaraciones al diario británico The Guardian.
"Así, por ejemplo, hace un mes participé en un concierto en Islandia en protesta contra la construcción de grandes represas en mi país. El ecologismo no es ya algo de hippies o de verdes, sino algo que interesa a todo el mundo", sentenció.
A mediados de 2005, la cantante mencionó a su interés por cambiar el panorama político mundial como uno de los motores que impulsó el proceso de creación de su disco "Medulla".
"Por primera vez he estado influida por la situación política en el mundo, de la que no estoy muy orgullosa como ser humano", explicó Björk, en aquella oportunidad.
La también actriz sostuvo esa vez que lo importante para ella la vida cotidiana de las personas y sus preocupaciones.
La protagonista de "Bailarina en la oscuridad" recordó que estaba en Nueva York cuando se produjeron los atentados del 11 de septiembre de 2001 y que le resultó sorprendente el hecho que una ciudad tan "internacional" se convirtiera en el lugar más "patriótico sobre la tierra", que llegó a comparar con "la Alemania nazi".
Su labor como embajadora de Unicef
Björk viajó recientemente a Aceh, en Indonesia, como embajadora de Unicef tras dedicar a las víctimas del tsunami asiático una nueva edición de su single de 1995 "Army of me".
La propia artista dijo estar al tanto sobre los escasos avances que tuvo su visita en los esfuerzos en la reconstrucción del siniestrado país. "Soy consciente de que ha sido muy, muy poco", sostuvo. (EFE)
