La actriz y modelo estadounidense Pamela Anderson pidió al primer ministro australiano, John Howard, impulsar una legislación que ponga fin a la costumbre de despellejar vivas a las ovejas, que posteriormente son faenadas.
La ex protagonista de "Guardianes de la bahía" quiere que se acabe con la "triste práctica" conocida como "mulesing".
Anderson, embajadora de la agrupación Gente por el Tratamiento Etico de los Animales (PETA), escribió una carta al primer ministro durante su visita de dos días a Australia para promocionar su marca de golosinas.
En la misiva a Howard, la actriz señala que "los consumidores están horrorizados al saber que los animales fueron reproducidos de una forma para que crezcan con más piel (y por lo tanto más lana)", y que por ello se les practica el "mulesing", con el que los granjeros australianos despellejan a las ovejas vivas.
El "mulesing" consiste en hacer varios cortes en la piel de las ovejas, la que se realiza sin anestesia y deja a los animales en carne viva, con el fin de que los parásitos no infecten la lana.
Anderson también pidió al primer ministro que actúe para que los exportadores no puedan enviar ganado vivo a Medio Oriente en barcos abarrotados y poco preparados para un largo viaje.
De esta manera busca evitar que se repita un escenario el registrado en septiembre de 2003, cuando 6.000 ovejas australianas de un total de 57.000 cabezas de ganado perecieron a bordo de un carguero que viajó al Golfo Pérsico, donde pasó seis semanas a la espera de encontrar un comprador. (EFE)