El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, aseguró este miércoles que llegó el momento en que Irán decida si quiere "anclarse en el pasado" o "abrir la puerta" al futuro.
"Es el momento de que el Gobierno iraní decida si quiere anclarse en el pasado o hacer los cambios necesarios para abrir la puerta a la prosperidad y a la justicia para sus ciudadanos", señaló.
"Irán debe elegir", afirmó Obama en un comunicado difundido por la página web de la Casa Blanca con motivo del 30 aniversario del asalto a la embajada de Estados Unidos en Teherán por decenas de estudiantes revolucionarios islámicos.
El presidente recordó que "los 444 días que comenzaron el 4 de noviembre de 1979", durante los cuales 52 personas fueron retenidas, como un evento que "ayudó a colocar a Estados Unidos e Irán en un prolongado camino de sospecha, recelo y confrontación".
"Tengo que dejar claro que Estados Unidos quiere dejar atrás el pasado y buscar una relación con la República Islámica de Irán basada en el interés y el mutuo respeto", explica Obama, al resaltar que su país "no se entromete en los asuntos internos" iraníes.
El presidente mencionó algunos gestos de Estados Unidos con respecto a Irán como la condena de los ataques terroristas en ese país y el reconocimiento del derecho internacional que asiste a Teherán para desarrollar una actividad nuclear con fines pacíficos.
Tras asegurar que "los estadounidenses tienen un gran respeto por los iraníes y su rica historia", Obama afirmó que "ahora la cuestión es qué tipo de futuro" quieren los iraníes.