El Pentágono ha iniciado la planificación de una estrategia alternativa para Irak que incluye "una retirada gradual de fuerzas y la instrucción de combatientes iraquíes", según indicó este lunes el diario Los Angeles Times.
El matutino, que cita como fuente de su información a funcionarios militares y consultores del Pentágono a los que no identifica, añadió que la alternativa contempla la posibilidad de que la estrategia actual "fracase o sea descarrilada por el Congreso".
La estrategia alternativa, según el diario de Los Ángeles, "se sustenta en parte en la experiencia de Estados Unidos en El Salvador en los años 1980".
A ese respecto, el periódico recuerda que Estados Unidos nunca envió tropas de combate a El Salvador para que enfrentaran a los guerrilleros, pero sí invirtió cientos de millones de dólares en el equipamiento, armamento e instrucción de las fuerzas militares del Gobierno.
En enero pasado el presidente George W. Bush ordenó el envío adicional de más de 21.000 soldados al contingente de unos 140.000 que Estados Unidos mantiene en Irak, y sostuvo que ese incremento temporal de fuerzas ayudaría al Gobierno de Irak a establecer su control, al menos en Bagdad.
El Congreso, donde ahora los demócratas tienen mayoría en ambas cámaras, ha estado debatiendo ideas que van desde el recorte de fondos para la guerra, hasta la imposición de objetivos y plazos para que Estados Unidos retire gradualmente sus tropas de Irak.
El diario recordó que en Vietnam, al igual que ahora en Irak, la participación militar directa de las fuerzas estadounidenses comprendió el despacho de cientos de miles de soldados, mientras que En El Salvador, Washington envió apenas en una década 55 "boinas verdes" para que instruyeran a las fuerzas gubernamentales.
Esta estrategia, según el diario, sería apartarse de forma "radical de la política actual del presidente Bush que consiste en el envío de un gran número de tropas con tácticas agresivas contra la insurgencia, pero tiene influyentes partidarios en el Pentágono".
"La nueva ronda de planificación ocurre en una atmósfera de tensión extraordinaria adentro del Pentágono que está lidiando con una guerra que pronto entra en su quinto año, que va mal en el terreno, y que pone grandes demandas sobre todas las fuerzas de Estados Unidos en el mundo entero", indicó el diario. (EFE)