Ali al-Haidri es el responsable iraquí de más alto rango abatido por los insurgentes desde que en mayo de 2004 perdió la vida el presidente del Consejo de Gobierno, Ezedin Salim.
El gobernador de Bagdad, Ali al-Haidri, fue asesinado por un grupo de pistoleros que tiroteó en la capital iraquí el vehículo en el que viajaba, informaron fuentes policiales.
El atentado causó también la muerte de seis de los escoltas de Al-Haidri, según informaron fuentes de seguridad.
A primera hora de este martes, un grupo de hombres armados cortó una de las carreteras del barrio Al Adel, al oeste de Bagdad, y ametralló el convoy en el que el responsable municipal se dirigía a su puesto de trabajo.
Al Haidri, de confesión chiita, resultó herido de gravedad y fue trasladado a uno de los hospitales de la zona, donde falleció poco después, explicaron las fuentes.
El gobernador, que había escapado con vida a un anterior intento de asesinato, es el responsable iraquí de más alto rango asesinado por los insurgentes desde que en mayo de 2004 perdiera la vida el presidente del Consejo de Gobierno, Ezedin Salim, a causa de un atentado con bomba. (EFE)
