En tres ataques distintos, insurgentes destruyeron vehículos militares e hirieron a civiles y uniformados en Bagdad y sus alrededores.
Al menos cuatro soldados estadounidenses murieron y otros seis resultaron heridos en un ataque con bomba al paso de un convoy militar por la localidad de Baiji, 180 kilómetros al norte de Bagdad, informó el mando de las tropas de ocupación.
Fuentes policiales locales explicaron que la caravana militar fue asaltada después de la explosión por un grupo de hombres armados con fusiles Kalashnikov y lanzagranadas ARPG.
Los pistoleros tirotearon la caravana y destruyeron dos vehículos antes de darse a la fuga, agregaron.
El comunicado estadounidense no detalló, sin embargo, este incidente posterior, y se limitó a indicar que el ataque ocurrió la noche del martes 9 de agosto en un área cercana a la ciudad.
Estados Unidos ha perdido más de una treintena de soldados en los últimos 10 días, durante los que se ha recrudecido la actividad de la insurgencia en Bagdad y toda la zona noroeste del país.
En total, alrededor de 1.850 militares del país norteamericano han perecido en acciones de combate en Irak desde que en marzo de 2003 comenzara la invasión y posterior ocupación de este país.
Por otra parte, fuentes policiales iraquíes informaron que al menos un agente murió y otros siete resultaron heridos a causa de la explosión de un proyectil de mortero en un área residencial de Bagdad.
Las fuentes detallaron que dos proyectiles cayeron sobre la plaza de Antar, en el barrio sunita de Aazamiya, una zona del norte de Bagdad considerada refugio de los insurgentes.
Finalmente, al menos otros dos policías iraquíes murieron y dos resultaron heridos al estallar una autobomba al paso de una patrulla en el barrio de Al-Ghazaliya, en el oeste de Bagdad.
La explosión causó también un número indeterminado de víctimas civiles, que fueron trasladadas a un hospital cercano. (EFE)
