París reaccionó con preocupación ante el anuncio de Teherán de su intención de reanudar la actividad de conversión de uranio en su central nuclear de Isfahán.
El ministro de Relaciones Exteriores francés, Philippe Douste-Blazy, afirmó este martes que la decisión iraní de reanudar sus actividades de conversión de uranio es "muy grave" y "puede ser el punto de partida de una gran crisis internacional".
"Me parece que este asunto iraní es muy grave y puede originar una crisis internacional importante", dijo Douste-Blazy, al día siguiente de que Irán notificara al Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) su intención de reanudar la actividad de conversión de uranio en su central nuclear de Isfahán.
El ministro francés señaló que los europeos van a proponer una reunión "extraordinaria, lo antes posible" del consejo de gobernadores del OIEA para pedir "muy firmemente" a Irán que vuelva
a la mesa de las negociaciones.
"Si los iraníes no aceptaran lo que les proponga el consejo de gobernadores, entonces la comunidad internacional tendrá que acudir ante el Consejo de Seguridad" de la ONU, agregó el ministro.
Señaló que "se verá entonces qué tipo de sanciones" se dictan contra Irán.
Unas horas antes, el primer ministro francés, Dominique de Villepin, también se había pronunciado por acudir ante el Consejo de Seguridad de la ONU si Irán no cumple sus compromisos de suspensión de sus actividades de "conversión, reprocesamiento y enriquecimiento" de uranio.
Irán continuó este martes desafiando a la comunidad internacional al seguir adelante con su decisión de reanudar sus actividades de conversión de uranio, pese a la amenaza del Consejo de Seguridad de la ONU, aunque reafirmó su voluntad de seguir negociando. (EFE)
