El Ministerio de Defensa judío advirtió que no hará diferencias a la hora de castigar a los responsables de la caída de cohetes Al Kasam sobre su territorio.
El ministro israelí de Defensa, Shaúl Mofaz, amenazó este martes con continuar con los "asesinatos selectivos", incluido el del designado primer ministro, Ismail Haniye, si los palestinos siguen con los disparos de sus cohetes Al Kasam.
Mofaz declaró a la emisora de radio de las Fuerzas Armadas de su país, Galei Tsahal, que "si Hamas como organización terrorista nos desafía de esa manera, ninguno de sus miembros quedará inmune, tampoco Ismail Haniye (futuro premier). Nadie allí es inmune".
Las declaraciones siguen a la muerte de dos militantes de la Yihad Islámica y de tres menores palestinos el lunes, cuando la aviación israelí disparó un misil contra un coche en el que viajaban los activistas, en el barrio de Sayaiye, de la ciudad de Gaza.
Además de los tres civiles muertos, al menos otros siete peatones resultaron heridos por la explosión.
El presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abás, encomendó hace más de dos semanas a Haniye la formación del nuevo gobierno tras la victoria electoral de su Movimiento de la Resistencia Islámica (Hamás) en las elecciones de enero pasado.
El ataque Israel, aparentemente, fue en represalia por ataques palestinos con cohetes Al Kasam contra la ciudad de Ashkelón, en cuyas inmediaciones se encuentra una planta de electricidad que proporciona sus servicios a la población de Gaza, y un oleoducto.
La mayoría de esos ataques, debido a la imprecisión de los cohetes -a los que están expuestas cuarenta localidades israelíes vecinas de la franja de Gaza- no tuvieron consecuencias.
El brazo armado de Hamas, los batallones de Azedín al Kasem, llevan un año sin reivindicar ningún ataque en virtud de un "período de tranquilidad" pactado hace un año con el presidente Abás, pero en medios militares israelíes se cree que "los encargan a otros".
Las ejecuciones extrajudiciales de militantes de las facciones palestinas armadas "es una política correcta y continuará", dijo Mofaz, criticado por el sector pacifista.
A este respecto, la diputada Zehava Gal-On, del frente pacifista Méretz-Iájad, estimó que esa "política es totalmente equivocada pues lo único que consigue, en lugar de poner fin al terrorismo, es estimularlo, porque siempre mueren también civiles inocentes".
Los fundadores de Hamas en 1987, el jeque Ahmed Yasín, un tetrapléjico en silla de rueda, y el ingeniero Abdelaziz Rantisi, su sucesor, fueron víctimas de esos "asesinatos selectivos" en 2004.
"Si Hamas escoge el camino del terrorismo -dijo Mofaz- no habrá diferencias" entre los militantes y los dirigentes políticos de ese movimiento integrista, que se responsabilizó de la muerte de más de 380 israelíes y extranjeros desde que comenzó la "Intifada de la mezquita de Al Aksa", en 2000, la mayoría en ataques suicidas. (EFE)
