Una escalofriante vinculación entre dos casos de menores perdidas en Europa hizo este martes el diario británico The Times, que detalló que el suizo Urs Hans Von Aesch, de 67 años, investigado por la desaparición de Ylenia Lenhard, de cinco años, estuvo en la zona portuguesa de Algarve de vacaciones, en la misma fecha en que se perdió el rastro de la niña británica Madeleine McCann, de cuatro años.
El pederasta, quien se suicidó después de haber herido a un hombre, cuando pensó que éste lo había delatado por el rapto de Lenhard, residía en España, en Benimantell, lo que lo ubica cerca del lugar donde se perdió el rastro de McCann.
Von Aesch fue encontrado muerto en la localidad de Oberburen, a unos 30 kilómetros de Appenzell, desde donde desapareció la niña suiza, quien -según constató la policía- fue introducida en la furgoneta el pederasta.
Según la prensa helvética, el sospechoso residía desde hace años en la zona de Alicante, España, aunque había regresado a su país hace algunas semanas, donde trataba de arrendar una vivienda.
La semana pasada la subdelegada del Gobierno en Alicante, Encarna Llinares, detalló que las fuerzas de seguridad hispanas participan en la búsqueda de la niña suiza desaparecida, y la Guardia Civil incluso visitó la casa de Von Aesch e interrogó a su mujer.
A una semana de su desaparición, sigue sin hallarse pistas sobre el paradero de la pequeña Ylenia, a pesar de la exhaustiva búsqueda por parte de decenas de policías, bomberos, militares y perros entrenados.
Sin embargo, para la policía del cantón de Saint Gallen, donde el martes 31 de julio se perdió Lenhard, la búsqueda tiene como objetivo hallar un cadáver.
"No nos hemos dado por vencidos, pero debemos esperar lo peor", advirtió Bruno Fehr, jefe de la institución, luego que se confirmara que restos de ADN de Von Aesch fueron hallados en un casco de ciclista de la niña, en su mochila y en su patineta. (Cooperativa.cl/EFE)