Víctor Montiglio no acogió la solicitud de los querellantes en el caso Operación Colombo y determinó que su designación de peritos médicos no podrá ser apelada a la Corte de Apelaciones.
El ministro en visita del caso Operación Colombo, Víctor Montiglio, no acogió la petición de los abogados querellantes Hiram Villagra y Hernán Quezada, quienes recusaron a dos de los tres peritos nombrados por el tribunal para realizar los exámenes médicos al desaforado ex gobernante Augusto Pinochet Ugarte.
Los juristas consideran que la orden de la Corte Suprema es realizar pericias siquiátricas al ex dictador, para determinar si está loco o demente, como diferencia el Código Penal, por lo que cuestionan la presencia de los neurólogos Jaime Kurt y Jorge Tapia Illanes.
La resolución de Montiglio tampoco deja espacio para que los abogados apelen ante la Corte de Apelaciones de Santiago, por lo que los test serán realizados por Kurt e Illanes, además del siquiatra Otto Dörr.
Estos serán secundados por Edulia Ortega e Isidro Huete, jefes de los laboratorios radiológicos de las universidades Católica y de Chile, respectivamente, además de las enfermeras Rocío Riquelme y María Nelly Araneda.
Augusto José Ramón Pinochet Ugarte, quien es acusado por su presunta participación -como autor intelectual- en el asesinato de 119 opositores a la dictadura, en la denominada Operación Colombo, está desaforado en la causa desde el 14 de septiembre pasado.
Según se comprobó judicialmente, la Operación Colombo fue un montaje de la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA), con la colaboración de servicios represivos de Argentina y Brasil, para encubrir en 1975 la desaparición de 119 opositores al régimen de Pinochet.
El montaje incluyó la publicación por única vez, en junio de ese año, de las revistas Lea, en Argentina y O Novo Dia, en Brasil, en las que se difundieron los nombres de las víctimas, bajo el supuesto que habían muerto en sangrientas purgas internas del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR), organización que combatió con las armas contra Pinochet.
La prensa nacional de la época acogió ampliamente las falsas versiones, bajo titulares como "Miristas se exterminan como ratas", en circunstancias de que los 119 habían sido detenidos meses o semanas antes en Chile y sus familias habían presentado recursos de amparo que fueron rechazados por los tribunales. (Cooperativa.cl)
