El organismo especializado en Protección Civil afirmó que se deben "reforzar nuestros niveles de credibilidad" para evitar situaciones como la ocurrida en la Octava Región.
Carmen Fernández, directora subrogante de la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi), estimó que la población debe tener plena confianza en la información sobre posibles desastres naturales que entrega la entidad, pues se cuenta con sistema de prevención que tiene una "posición de vanguardia en el mundo".
En conversación con El Diario de Cooperativa, la funcionaria dijo que hay que "reforzar nuestros niveles de credibilidad", ya que aunque "no se oculta ni la más mínima información" y se realizaron varios desmentidos, la noche del lunes 17 de enero "volvió a subir otro grupo de personas" a algunos cerros de la zona, aún temerosos de que efectivamente hubiera un maremoto.
Fernández, quien es la jefa de Protección Civil del organismo, agregó que en la primera situación de este tipo, registrada la noche del lunes y madrugada del lunes en la Octava Región, hubo un "fenómeno netamente comunicacional, lo que evidentemente tenemos que considerar como un nuevo desafío".
La directora (s) de Onemi reiteró que un maremoto sólo puede producirse tras un sismo de más de 7,5 grados en la escala de Richter, cuyo epicentro sea en el mar, frente a lo cual el sistema de alerta de la Armada detecta en forma inmediata la formación de un tsunami.
Sobre la preparación de la población en las distintas zonas del país, la funcionaria estimó que decir que en el Norte Grande hay más conciencia es "un mito que ha circulado tanto en las últimas semanas".
"No confundamos la capacidad que tienen algunos municipios para informar a través de los medios de lo que han hecho, con otros que han trabajado también con sus comunidades, pero lo han hecho de modo más silencioso. Hay una cantidad muy importante de comunas hoy en día, con planes muy avanzados", sentenció.
El riesgo de maremoto no es sólo de las regiones Primera y Segunda, sino que de casi todas las comunas costeras, por lo que desde la década de 1990 la Onemi –detalló Fernández– trabaja en métodos preventivos e integrales, parte de un proceso largo que buscó cambiar la tesis "reactiva" con que se miraban las emergencias en el país.
Frente a las críticas que hizo la alcaldesa de Concepción, Jacqueline van Rysselberghe, quien acusó a la Onemi de trabajar sólo en horario de oficina, Carmen Fernández recordó que los municipios son, de acuerdo a la planificación nacional para emergencias, la "primera línea en la cadena de respuesta frente a cualquier evento".
La Onemi "funciona los 365 días del año, las 24 horas del días con personal de turno", mientras que las oficinas regionales trabajan de acuerdo a las posibilidades locales, pero "su personal está alerta las 24 horas (del día) con sistemas de comunicación, y así fue como se activó la madrugada de ayer (lunes en Concepción)", sentenció.
La jefa de Protección Civil concluyó que no se trata de tener personal "calentando la silla" en oficinas, pues lo que importa es la capacidad de los funcionarios para reaccionar ante cualquier evento, no importando su ubicación física, lo que quedó demostrado en la Octava Región, donde la Onemi local activó rápidamente su plan de contingencia, a diferencia del municipio.
La madrugada del pasado lunes, un rumor sobre la posibilidad de un maremoto en la Octava Región movilizó a cerca de 18.000 personas, quienes en una reacción de histeria colectiva dejaron sus hogares para dirigirse a lugares altos, a pesar de que autoridades informaron que no existía riesgo alguno.
