El incendio en el que murieron los seis bomberos, un portugués y cinco chilenos, mientras trabajaban en la extinción de las violentas llamas en la localidad portuguesa de Famalicao, se debió a la negligencia de un joven agricultor que utilizaba una moto podadora cerca del bosque, según las últimas investigaciones policiales.
Según las investigaciones, Thiago Gonzalvez, de 18 años, estaba limpiando con una moto sierra la maleza de una propiedad privada, ubicada cerca del bosque de Famalicao da Serra, cuando una chispa que saltó de la máquina prendió la hierba.
Gonzalvez declaró durante más de tres horas en el juzgado policial de Famalicao y fue puesto el libertad condicional.
Además, en estas pesquisas se llegó a conocer que las grandes llamas que atraparon a los bomberos fueron ocasionadas por un cambio repentino de la dirección del viento.
El equipo de investigación esta formado por representantes del Gobierno, Bomberos, Protección Civil y Afocelca, sociedad portuguesa creada en 2002 por tres empresas papeleras y que contrató a los bomberos de Chile.
Los cinco chilenos muertos formaban parte de un grupo de 20 brigadistas de nuestro país, con experiencia en combate de fuegos forestales, que durante varios años han ido a trabajar a Portugal durante la temporada de verano.
Los bomberos, con edades comprendidas entre 22 y 30 años, trabajaban para la Chilean Forest Service y llegaron a Portugal a principios de julio contratados por Afocelca.
El bombero portugués que también falleció, fue enterrado el 10 de julio tras celebrarse su funeral en Guarda. Al la ceremonia asistieron numerosos vecinos y autoridades políticas y religiosas.
Mientras, que las familias de los chilenos fallecidos están a la espera que la delegación del Instituto Nacional de Medicina Legal de Guarda les entregue los cuerpos de los bomberos chilenos para poder proceder a su repatriación.
En 2003 dos chilenos de un equipo similar fallecieron también cuando combatían un incendio en la localidad portuguesa de Santarem. (Agencias)