Damnificados de Ñuñoa denunciaron abandono por parte del municipio
Vecinos de las villas Olímpica, Canadá y Salvador Cruz acusaron paralización de los trabajos.
Concejal DC acusó que la situación desbordó la capacidad del alcalde.
Vecinos de las villas Olímpica, Canadá y Salvador Cruz acusaron paralización de los trabajos.
Concejal DC acusó que la situación desbordó la capacidad del alcalde.
Vecinos de las villas Olímpica, Canadá y Salvador Cruz de la comuna de Ñuñoa denunciaron un abandono de las autoridades municipales tras el terremoto, acusando la interrupción de las faenas de reparación y reconstrucción desde hace varias semanas y señalando que a más de un mes de la catástrofe, todavía hay familias viviendo en carpas.
La situación fue refrendada por el concejal DC Jaime Castillo, que preside la Comisión de Obras y Urbanismo de Ñuñoa, quien indicó que "esa gente que sigue viviendo en carpas está sufriendo una situación de peligro atroz, angustiosa, porque vienen los fríos, las lluvias y no se avizora solución".
"Yo tengo la impresión de que la situación en tres villas sociales de Ñuñoa está desbordando la capacidad de gestión del alcalde y del municipio en general", agregó el edil.
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| Pedro Sabat se impacientó: "Quienes tienen sus departamentos en condiciones de habitar y quieren seguir viviendo en carpas, allá ellos". (Foto: UPI) |
El aludido Pedro Sabat respondió las acusaciones señalando que su administración ha destinado más de 1.200 millones de pesos para la reconstrucción, y que "a todos aquellos que no pueden vivir en sus departamentos se les ha dado la posibilidad, en conjunto con la Municipalidad, de arrendar un departamento".
"Lo que pasa es que hay algunos señores que no les gusta el departamento, y otros que no quieren. Están llevando la situación a un extremo, es decir, yo no puedo arrendarle departamentos a todo el mundo. Los que tienen sus departamentos en condiciones de habitar y quieren seguir viviendo en carpas, allá ellos" , agregó.
El alcalde terminó señalando que en el caso específico de la Villa Canadá se interrumpieron las labores de reparación de los techos porque a los vecinos "no les gustó el color del techo, que era azul, y dijeron que era muy ordinario y les hacía perder el valor", siendo que "cada una de esas techumbres nos costó ocho millones de pesos".