El volante chileno de AS Roma sufrió la muerte de su abuela, triste episodio al que suma la enfermedad de su hermana Claudia, afectada por una diabetes fulminante.
Lo bien que le ha ido en la cancha a David Pizarro en AS Roma, contrasta con el doble drama familiar que afecta al mediocampista nacional.
Pizarro volvió el martes a Chile por el delicado estado de su abuela, quien finalmente falleció víctima de una infección renal en el Hospital Carlos van Buren.
Los restos de María González son velados en la casa de los padres del futbolista, en el cerro Playa Ancha de Valparaíso y el funeral se efectuará en el cementerio número tres de la ciudad porteña.
La angustia de Pizarro es mayor aún debido a la enfermedad que sufre su hermana Claudia, quien está desahuciada por una diabetes fulminante, que ni siquiera pudo ser tratada en Italia, hasta donde la llevó el jugador.
Debido a estos duros inconvenientes, David Pizarro no pudo actuar este miércoles en Grecia, en el encuentro de AS Roma contra Olympiakos, por la Liga de Campeones. (Cooperativa.cl)
