La Papelera compró 2 máquinas para fabricar la protección bucal, mientras que la cervecería usará el alcohol que sobra de sus productos "cero".
Las cervezas "sin alcohol" tienen una externalidad en tiempos de Covid-19.
El holding CMPC anunció que a través de su filial Softys compró 2 máquinas para la fabricación automatizada de mascarillas del tipo quirúrgicas, que serán instaladas en sus plantas en Puente Alto y Caieiras (en Sao Paulo, Brasil).
Según la empresa, "cada máquina alcanza una producción de 1 millón 500 mil mascarillas al mes y se espera que se encuentren produciendo en alrededor de 30 días".
"No estamos abordando este desafío como un negocio (...) nuestra intención en el actual contexto es distribuir estas mascarillas de manera totalmente gratuita a través de los servicios públicos de salud", aseguró Gonzalo Darraidou, gerente general de Softys.
En tanto, el grupo CCU anunció la donación al Ministerio de Salud de más de 100 mil unidades de alcohol gel de 500 ml., fabricadas a partir de las cervezas sin alcohol que produce en el país.
"Ante la escasez de alcohol gel, hemos decidido utilizar el alcohol, que es un subproducto del proceso productivo de nuestras cervezas sin alcohol, y ponerlo a disposición de esta difícil emergencia sanitaria", detalló Patricio Jottar, gerente general de CCU.
La primera partida, fabricada en la planta de Quilicura por CCU y especialistas, "ya cuenta con todas las autorizaciones sanitarias correspondientes y proviene de la desalcoholización de las cervezas Cristal Cero y Heineken 0.0".
