McCartney visita al siquiatra para superar su proceso de divorcio
La ex mujer del artista lo acusó de ser violento, dominante y estar frecuentemente drogado y bajo los efectos del alcohol, lo que causó "conmoción" en el ex Beatle.
La ex mujer del artista lo acusó de ser violento, dominante y estar frecuentemente drogado y bajo los efectos del alcohol, lo que causó "conmoción" en el ex Beatle.
El ex integrante de The Beatles, Paul McCartney, está asistiendo al siquiatra, para sobrellevar el divorcio de su segunda esposa, Heather Mills, que, según documentos filtrados a la prensa, lo ha acusado de maltrato.
En declaraciones publicadas este viernes por el diario británico The Sun, un amigo del cantante aseguró que McCartney está "conmocionado" por las acusaciones de la ex modelo, e indicó que la batalla legal por su separación está "haciendo estragos" en la salud del músico.
"Está sufriendo mucho y las mentiras de ella sólo contribuyen a aumentar su angustia", comentó el entrevistado, por eso decidió visitar a un siquiatra y "hablar sobre ello".
De acuerdo a los documentos filtrados -que, supuestamente, forman parte de la respuesta de la mujer a la petición de divorcio tramitada por McCartney en julio pasado- el artista fue violento con ella, era dominante y estaba frecuentemente ebrio o bajo los efectos de las drogas.
"Conocí a su mujer Linda (fallecida en 1998 por un cáncer) 20 años y nunca jamás se quejó de que él le hubiera puesto un dedo encima" declaró el amigo citado por The Sun, y aseguró que el cantante de 64 años no tiene un carácter violento.
Por otra parte, Juliet Gellatley, una activista amiga de Heather Mills salió en su defensa para desmentir las acusaciones de que la ex modelo es una oportunista o fantasiosa.
"No sé cómo lleva el divorcio. Lo único que puedo decir es que Heather es encantadora, cálida y muy apasionada, y tiene un gran sentido del humor", declaró Gellatley a la cadena de televisión GMTV .
Entre tanto, el mayor apoyo de McCartney en este momento han sido sus hijos Mary, de 37 años; Stella, de 35, y James, de 29. (EFE)