Goran Bregovic desordenó la noche santiaguina
Actuó en el Teatro Nescafé de las Artes por más de dos horas
El público terminó bailando en los pasillos y a los pies del escenario.
Actuó en el Teatro Nescafé de las Artes por más de dos horas
El público terminó bailando en los pasillos y a los pies del escenario.
El músico Goran Bregovic protagonizó un encendido espectáculo la noche del martes en Santiago, ante 970 personas que llegaron al Teatro Nescafé de las Artes.
El público fue llegando sobre la hora y costó que ingresara a sus asientos numerados, tanto así que fueron necesarios dos músicos tocando bronces para hacer las veces de flautista de Hamelín, en medio de la sorpresa y los aplausos de la gente.
Todos se ubicaron en sus respetivos puestos, pero a poco andar los ritmos balcánicos sacaron desde sus ubicaciones a los asistentes, muchos de los cuales se fueron ubicaron a los pies del escenario primero y los pasillos después.
Junto a la Orquesta para Bodas y Funerales y por espacio de más de dos horas sonaron temas de discos como "Tales and Songs from Weddings and Funerals", "Karmen with a Happy Ending", "Alkohol" además de canciones de famosas cintas como "Underground y "Tiempo de gitanos".
Hubo espacio para sobrecogerse con las voces de sus dos coristas en composiciones en los que Bregovic pedía escuchar sentado en el piso o donde fuera, y por supuesto también para el carnaval gitano de temas como "Mesecina" y "Ya Ya (Ringe, ringe, raja)", además de canciones con letras en castellano.
El artista balcánico, más allá del idioma, trasunta que lo suyo es disfrutar de la vida, brindando a la salud de Chile y en un capítulo notable, salvando el impasse de haber "cortado" cuerdas.
El mismo se paró mientras sus músicos seguían tocando, buscó materiales en la parte posterior del escenario, sin mayor resultado. Dio instrucciones por micrófono y al poco rato le llegaron cuerdas de repuesto.
Eligió una, y él mismo la colocó en la guitarra y la afinó sin hacerse problema, muy a tono con el alegre espectáculo que culminó al ritmo de "Kalashnikov", con un público entre los que se contaron los actores como Daniel Muñoz, Rosa Ramírez, Celine Reymond, además de músicos como Camilo Salinas, en su regreso a Chile luego de dos años.