La actriz fue informada este lunes de la situación.
Ya cuenta más de dos años sufriendo acosos, por distintas plataformas digitales.
"No tengo por qué verle el miembro a nadie", comentaba Catherine Mazoyer en mayo pasado, cuando reveló que ya contaba dos años siendo víctima de acoso, recibiendo fotografías y videos obscenos, además de la supuesta filtración de imágenes desnuda y la intervención de su Instagram.
Pero este martes la historia dio un giro que incluso tomó a la propia víctima del asedio por sorpresa: la Brigada del Cibercrimen de la PDI determinó que el hackeo que detonó todo se produjo desde la dirección IP de su propia casa.
La actriz acudió el lunes hasta las oficinas de la policía civil para entregar más antecedentes, pero fue justamente en ese momento, tras casi cuatro meses de indagaciones, que fue informada de la situación, según publicó La Cuarta.
En las afueras del cuartel se encontraba un equipo de "Intrusos" con el que Catherine Mazoyer había acordado comentar los avances de la investigación, pero una vez en conocimiento del hecho que había detonado todo, la mujer de 37 años decidió partir sin decir una sola palabra.
