El documento estableció participación de funcionarios de una gobernación opositora en las muertes.
Según los legisladores, el texto es "parcializado e irresponsable" y que no ayuda a la verdad.
El presidente del Senado de Bolivia, el opositor Óscar Ortiz, pidió a la presidenta temporal de Unasur, la Presidenta Michelle Bachelet, que revise el informe sobre los sucesos ocurridos en septiembre en el departamento amazónico de Pando.
Ortiz, de la alianza opositora Poder Democrático y Social, transmitió el jueves esta petición al representante de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), el ex ministro de Exteriores chileno Juan Gabriel Valdés, que se encontraba de visita en Bolivia.
"Hemos presentado una serie de argumentos por los cuales consideramos que ha sido un informe parcializado, sesgado, irresponsable y que no ha llenado los requisitos de establecer la verdad", afirmó el titular del Senado.
La misión que realizó el informe, dirigida por el argentino Rodolfo Mattarollo, concluyó que en la región amazónica de Pando hubo una masacre "planificada" de 20 campesinos, seguidores del presidente boliviano, Evo Morales, y un crimen de "lesa humanidad".
La comitiva de Unasur estableció la participación de funcionarios de la prefectura (gobernación) opositora de Pando en la matanza ocurrida el pasado 11 de septiembre, durante una ola de protestas desatadas por la oposición contra el jefe de Estado boliviano.
Ortiz expresó su compromiso de presentar oficialmente ante Bachelet sus objeciones al informe para que "puedan ser analizadas por el conjunto de las personas que participaron en la elaboración del mismo" e incluso por otras instancias especializadas en la investigación de este tipo de casos.
Ortiz ya pidió en diciembre pasado, en una carta a los mandatarios de Unasur antes de la cumbre de Brasil en la que se presentó el informe, una nueva investigación de los sucesos de Pando, tras tachar de "incompleto e insustancial" el documento presentado por ese organismo.
