José Díaz Silva fue detenido el 2 de marzo pasado frente a su casa por la policía política.
"Su sola opinión política es inaceptable para el Gobierno cubano", dice el grupo del exilio a Bachelet.
Una organización del exilio cubano en Miami (EEUU) pidió este miércoles a la alta comisionada de los Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet, que interceda por José Díaz Silva, un opositor acusado de "desacato" en Cuba, y denunció que la "represión" alcanza también a los que no participaron en las protestas de 2021.
Silva, presidente del Movimiento de Opositores por Una Nueva República, fue detenido el 2 de marzo pasado frente a su casa por la policía política y llevado a Villa Marista, donde se encuentra arrestado desde ese día, señaló el Directorio Democrático Cubano.
"El régimen ha fabricado un supuesto caso de 'desacato' en su contra, sin sustento legal alguno, como represalia a sus actividades cívicas y pacificas por la libertad de Cuba", señala un comunicado anunciando el envío de una carta a Bachelet para pedir que interceda en su favor.
Los exiliados dicen haber enviado cartas a organizaciones defensoras de los derechos humanos informando del caso de Silva, pero consideran "fundamental" que Bachelet, "la máxima autoridad institucional" en la materia, actúe "para evitar la cárcel a un inocente".
En la carta, los exiliados resaltan que la organización que preside Silva "promueve, por vía pacíficas, una reforma democrática que permita a Cuba transitar del sistema comunista actual hacia una nueva república genuinamente democrática y pluralista".
El Directorio Democrático Cubano recuerda que, desde las protestas contra el régimen comunista del 11 de julio, las autoridades han desatado "una violenta y arbitraria represión que ha llevado a las prisiones con sentencias de hasta 20 años de cárcel a cientos de personas inocentes que solamente ejercieron su derecho a expresarse públicamente".
También destacan en la misiva que la represión es ejercida incluso contra personas que, como Silva, no participaron en esas protestas.
"Su sola opinión política es inaceptable para el Gobierno cubano", dice el grupo del exilio a Bachelet.
En la carta mencionan que la acusación de desacato se basa en que Silva "escribió pintadas en paredes cercanas a su casa", algo de lo que no existe evidencia alguna, agregan.
