Fiscalía ecuatoriana que investiga presunto fraude allanó oficina de empresa electoral
E-vote es pesquisada por posible delito informático, al procesar los datos de los comicios presidenciales celebrados el fin de semana en el país andino.
E-vote es pesquisada por posible delito informático, al procesar los datos de los comicios presidenciales celebrados el fin de semana en el país andino.
La Fiscalía de Quito allanó las oficinas de la empresa brasileña E-vote para investigar la denuncia de un presunto delito informático en el recuento rápido de votos que efectuó esa firma en las elecciones del pasado domingo.
El fiscal de la provincia de Pichincha, cuya capital es Quito, Washington Pesántez, ingresó en las oficinas de E-vote, ubicadas en el norte de la capital, junto a policías, para recoger informaciones que puedan contribuir a la investigación.
El abogado independiente Stalin Raza puso una demanda contra la empresa brasileña, acusándola de un supuesto delito informático, y pidió a la Fiscalía el allanamiento para averiguar las causas de la paralización del recuento rápido de votos en la madrugada del lunes.
E-Vote fue contratada por el Tribunal Supremo Electoral (TSE) para que efectuara el recuento rápido, pero su sistema informático colapsó y no pudo completar su trabajo.
La empresa brasileña se había comprometido a anunciar los resultados extraoficiales una hora y media después del final de las votaciones del domingo, pero hasta ahora no lo ha hecho.
El TSE rescindió el lunes el contrato con E-Vote y anunció que le impondría una multa, además de presentar una demanda por daños y perjuicios en su contra.
Según declaraciones de los empleados de la firma brasileña al fiscal Pesántez, el sistema se colapsó, aparentemente, por una incompatibilidad de sus sistemas con los del TSE.
E-Vote, según esas declaraciones, explicó con anticipación el problema al TSE, pero el organismo electoral no habría hecho caso a la queja.
El fiscal Pesántez solicitó al juez penal Jaime Santos que dicte una orden de arraigo contra Santiago Murray, representante de la firma brasileña, así como a sus colaboradores más cercanos.
Pesántez también pidió al juez que ordene el embargo de todos los bienes de la empresa brasileña en el país, para investigar si existen indicios suficientes sobre un supuesto delito informático.
La empresa brasileña no concluyó el recuento rápido de votos, pues su sistema informático se paró la madrugada del lunes cuando llevaba la cuenta del 70,5 por ciento de votos.
Hasta ese corte, el multimillonario candidato a la presidencia Alvaro Noboa aventajaba por cuatro por ciento al izquierdista Rafael Correa.
E-Vote, que ofreció reanudar su cuenta y anunciar sus resultados extraoficiales, apenas avanzó hasta el 72,25 por ciento, donde se mantiene parado.
El TSE, tras las críticas, rescindió el contrato con E-Vote y aclaró que el recuento rápido es un sistema extraoficial, ya que el escrutinio que hacen los tribunales electorales en las provincias es el único que ofrece resultados oficiales. (EFE)