Luego de que el Senado aprobara el retiro de las tropas del país árabe, el mandatario estadounidense reiteró su rechazo a las medidas parlamentarias y dijo que las vetará.
El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, rechazó este sábado los proyectos de ley aprobados por la Cámara Baja y el Senado sobre Irak, porque marcan "una fecha arbitraria para rendirse" y reiteró que los vetará.
En su mensaje radial semanal, Bush criticó las propuestas porque a su juicio "perjudican a nuestras tropas en el terreno". A su juicio, en ellas los políticos asumen el poder de tomar decisiones militares, en detrimento de los generales.
"Los proyectos impondrían condiciones restrictivas a nuestros comandantes militares", dijo Bush.
Además, "establecerían una fecha arbitraria para rendirse y retirarse de Irak, lo que creo que tendría consecuencias desastrosas para la seguridad en nuestro propio territorio", remarcó.
El Senado aprobó el jueves la retirada de todas las tropas de combate hasta el 31 de marzo del año que viene, pero se trata de un objetivo y no es vinculante.
Sí lo es la versión del proyecto de ley aprobada previamente por la Cámara de Representantes, que obliga a repatriar a los soldados hasta el 1 de septiembre de 2008.
Las dos cámaras deben armonizar ambas propuestas, sacadas adelante principalmente con el apoyo demócrata, antes de que un único texto llegue al escritorio del presidente. No obstante, Bush reiteró este sábado que vetará el proyecto de ley.
Para revertir esa medida es necesario una mayoría de dos tercios en ambas cámaras, por lo que los demócratas deberían convencer a muchos republicanos de que les dieran su apoyo.
La referencia a las fechas forma parte de los proyectos de ley que aprueban los gastos adicionales para la guerra en Irak solicitados por el presidente.
En esos textos también se incluyen otros gastos no relacionados con el conflicto, que Bush destacó en su mensaje como otra razón para vetar los proyectos de ley.
Así, afirmó que asignan 3,5 millones de dólares para facilitar las visitas turísticas al Capitolio, 6,4 millones para salarios en la Cámara Baja y 74 millones para el almacenamiento de maní.
"Me gustan los maníes tanto como a cualquier otra persona, pero creo que la seguridad de nuestras tropas debería anteponerse a la seguridad de la cosecha", dijo Bush.
En su mensaje, el presidente también criticó la aprobación de los proyectos de ley para el presupuesto del año fiscal 2008, que comienza en octubre.
Bush destacó que las propuestas, impulsadas por los demócratas, elevan los impuestos, así como el gasto, una medida que calificó como "irresponsable".
Los proyectos no renuevan las rebajas tributarias temporales aprobadas a insistencia del presidente durante su primer mandato, mientras que prevén un aumento del gasto mayor que lo solicitado por Bush. (EFE)
