El ataque, registrado unos 30 kilómetros al sur de Bagdad, afectó a un vehículo que transportaba a chiítas hacia la ciudad santa de Kerbala, y marca una nueva jornada de violencia.
Ocho personas murieron y otras cuatro quedaron heridas tras la detonación de un artefacto explosivo colocado en un minibus en la ciudad de Mahmudiya, 30 kilómetros al sur de Bagdad, informaron fuentes policiales.
Según las fuentes, la furgoneta recorría el trayecto entre Bagdad y Kerbala, y transportaba a chiítas que se dirigían en peregrinaje a esa ciudad santa para esa rama del Islam.
Mahmudiya está ubicada en el llamado "Triángulo de la Muerte", un área de atentados frecuentes de la insurgencia sunita, aunque todavía no está claro quién colocó la carga explosiva en el vehículo.
Casi al mismo tiempo que se producía este atentado, otras cuatro personas murieron en un ataque con morteros a un área residencial, también en Mahmudiya, en el que también resultaron dañadas varias casas.
En tanto, un vocero de la Fuerza Conjunta iraquí-estadounidense anunció la muerte de al menos tres personas en la provincia de Salahedin, después de que helicópteros de EE.UU. disparasen a un grupo de personas que robaban petróleo de un oleoducto.
La operación, en la que también resultaron heridas dos personas, tuvo lugar cerca de Baiji, sede de una importante refinería que abastece de derivados del petróleo a Bagdad y sus alrededores. (EFE)
