El jefe de Gobierno japonés no siguió la línea de George Bush y de Israel de presionar al nuevo gobierno palestino, y pidió que se continúe con el proceso de paz marcado por la Hoja de Ruta.
El primer ministro japonés Junichiro Koizumi hizo un llamado a la nueva autoridad palestina liderada por Hamas para que ponga fin a la violencia, pero se abstuvo de emular al presidente estadounidense, George Bush, quien puso condiciones al nuevo gobierno, informó la agencia de noticias local Kyodo.
Al comentar los resultados de las elecciones palestinas del pasado miércoles, el mandatario aseguró que sería ideal "si un Gobierno de línea dura controla a los más radicales".
Según Kyodo, Koizumi no hizo eco de los comentarios del presidente estadounidense George W. Bush y del primer ministro israelí Ehud Olmert sobre la negativa a negociar con Hamas si no renuncia a la violencia en sus relaciones con Israel.
Hamas, expresó Koizumi, "no esperaba probablemente tomar el poder" y ahora tiene la responsabilidad como gobierno de "seguir la senda de la coexistencia".
El ministro portavoz del Gobierno, Shinzo Abe, resaltó la importancia de que la comunidad internacional incluido Japón, continúe animando tanto a palestinos como israelíes para que no se estanque el proceso de paz marcado por la Hoja de Ruta.
En tanto, el ministro de Relaciones Exteriores, Taro Aso, expresó por su parte la esperanza de que Hamas controle las fuerzas violentas en Palestina y citó el ejemplo del primer ministro de Israel Ariel Sharon, considerado en su momento "un radical que más adelante aceptó buscar vías hacia la paz", dijeron las mismas fuentes. (EFE)
