La canciller alemana, Angela Merkel, aseguró este jueves que una salida apresurada del ejército alemán de Afganistán sería un acontecimiento "más catastrófico" que las consecuencias de los atentados terroristas perpetrados en Estados Unidos el 11 de septiembre de 2001 y sumiría al país afgano "en el caos y la anarquía".
En una declaración de gobierno ante el Bundestag (cámara baja del parlamento alemán), Merkel recalcó que esa retirada antes de tiempo supondría un "estímulo" para los extremistas radicados en Afganistán y en otros países vecinos.
También destacó que la operación en el país asiático es fundamental en la lucha contra el terrorismo internacional y "sería una conclusión errónea pensar que Alemania no está en el punto de mira del terrorismo internacional", afirmó.
Merkel aludió a las críticas vertidas contra la presencia alemana en Afganistán después de que ocho soldados alemanes fallecieran en sendos atentados en Afganistán en las últimas tres semanas.
La canciller aseguró que su gobierno, que aglutina a cristianodemócratas, socialcristianos y liberales, no "minimiza" ni "encubre" la difícil situación de seguridad que los soldados alemanes viven en Afganistán.
No obstante, insistió en que no se puede pedir "valor" a sus militares, si los diputados del Bundestag no tienen la "valentía" de respaldar la decisión adoptada el pasado febrero de ampliar el contingente germano hasta un máximo 5.350 soldados.
Merkel admitió, sin embargo, que hubo algunos errores en la estrategia prevista para Afganistán en el último año.
"Hubo algunos avances y demasiados retrocesos y algunos de nuestros objetivos fueron en parte irreales o en parte incorrectos", afirmó.