En sus escritos, Juan Pablo II sugiere que pensó en renunciar tras el Jubileo 2000

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Autor: Cooperativa.cl

El Papa evaluó la posibilidad de dimitir a su cargo tras la celebración, según algunas interpretaciones de su testamento, conocido este jueves en el Vaticano.

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Juan Pablo II pensó en la posibilidad de renunciar al papado tras el Jubileo 2000, de acuerdo a las interpretaciones de uno de los documentos que componen su testamento, el que fue dado a conocer este jueves en el Vaticano. Sin embargo, otras matizan que sólo se puso a disposición de Dios.

 

El Pontífice legó una serie de notas en polaco, las que fueron traducidas antes de ser publicadas.

 

"Espero que Él (Dios) me ayude a reconocer hasta cuándo debo continuar este servicio, al cual me llamó el día 16 de octubre de 1978". Esta frase, incluida en el documento de 15 páginas, ha dado lugar a distintas explicaciones, la mayoría de las cuales señala que Juan Pablo II se planteó la posibilidad de renunciar a su cargo hace cinco años.

 

Agencias y medios de todo el mundo, como la agencia española EFE, Reuters o la BBC, publicaron este jueves una interpretación según la cual Karol Wojtyla, al contrario de lo que siempre había afirmado en vida, llegó a pensar en dimitir.

 

Sin embargo, algunos periódicos italianos, basándose también en el texto original, han hecho hincapié en un fragmento que parece centrarse más en la idea de la muerte que en la renuncia.

 

En el testamento, el fallecido jefe de la Iglesia Católica pide perdón a todos, a la vez que solicita que recen por él.

 

"Estén alerta, porque no saben qué día nuestro Señor vendrá", es la primera frase de la última voluntad del "Papa viajero", quien atribuye a la intervención de la Divina Providencia su supervivencia al atentado que sufrió en 1981, así como que la Guerra Fría no haya derivado en un "violento conflicto nuclear".

 

Además, el texto -que con anterioridad revisaron los cardenales- señala que el Papa, en 1982, no descartó que al momento de su muerte sus funerales se realizaran en Polonia, como esperaban sus compatriotas, pero posteriormente precisó que la decisión debía ser tomada por el Colegio Cardenalicio.

 

Sobre sus exequias, dispone que se le sepulte en forma normal "y no en un sarcófago", por lo que su cuerpo descansará dentro de tres ataúdes y no en una caja fúnebre construida especialmente para la ocasión, como en el caso de algunos pontífices que le antecedieron.

 

También el testamento aclara que el ex arzobispo de Cracovia no dejó ninguna posesión material, y enfatiza que desea que todos sus apuntes privados sean incinerados.

 

Wojtyla dejó palabras de agradecimiento para su secretario particular, el fiel Estanislao Dziwisz, recuerda a sus padres y hermanos y en otro apartado también tiene palabras de agradecimiento para el que fuera rabino jefe de Roma, Elio Toaf.

 

El fallecido Papa siempre estuvo preparado para la muerte, según escribió todas las veces que retocó el testamento, que tiene fecha del 6 de marzo de 1979 e incluye nuevas notas hechas en 1980, 1982 -en dos oportunidades-, 1985 y 2000.

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