En tu texto leído a su nombre, el Pontífice ofreció su sufrimiento por el bien de la humanidad y por la purificación de los hombres.
El Papa Juan Pablo II se asomó este domingo tras los cristales de la ventana de su habitación en el Policlínico Gemelli de Roma, para bendecir a los fieles presentes en las afueras del recinto, durante el rezo del Angelus.
Esta es la segunda vez, tras ser sometido el 24 de febrero a una traqueotomía, que el Pontífice aparece en público, aunque por escasos minutos.
Juan Pablo II, que cumplirá 85 años en mayo próximo, apareció sentado en un sillón y acompañado por el Secretario de Estado vaticano, el cardenal Angelo Sodano, y los médicos que le atienden.
El anciano Pontífice impartió la bendición varias veces a los centenares de fieles presentes en la explanada del Gemelli y a los miles que se encontraban en la plaza de San Pedro del Vaticano, donde rezó el Angelus en su nombre el sustituto de la secretaria de Estado, el arzobispo argentino Leonardo Sandri.
En varios momentos se le vio como fijaba su mirada a través de los cristales para ver a los fieles presentes en Gemelli.
En el texto preparado para el Angelus y leído en su nombre por el arzobispo Sandri, Juan Pablo II ofreció su sufrimiento por el bien de la humanidad y por la purificación de los hombres.
También expresó su agradecimiento a todos los fieles y a las otras religiones, en especial judíos y musulmanes, por las pruebas de afecto que le están mostrando en estos días de hospitalización.
Juan Pablo II ya apareció tras los cristales de la ventana del Gemelli el domingo pasado, 27 de febrero. Así, se concretó la segunda ocasión -en sus 26 años de pontificado- en que el líder de la Iglesia Católica no preside el rezo del Angelus.
El Papa se encuentra internado a raíz de una crisis respiratoria, y según el Vaticano, la herida que quedó tras la traqueotomía a que fue sometido está en proceso de sanar, mientras el religioso ejercita su voz. (EFE)
