A la menor no se le renovó la matrícula para cursar la enseñanza media.
La Corte de Apelaciones indicó que el establecimiento usó "criterios antojadizos y poco objetivos".
La Corte de Apelaciones de Santiago acogió un recurso de protección presentado por los padres de una estudiante, a quien no se le renovó la matrícula para cursar primero medio el 2012 en el Colegio San Juan Bautista de Macul.
E
n fallo unánime, la Tercera Sala del tribunal de alzada -integrada por Mauricio Silva Cancino, Daniel Calvo Flores y Andrea Muñoz Sánchez- aceptó la acción cautelar presentada por los padres de la menor. El documento determina el actuar arbitrario e ilegal del establecimiento al no renovar la matrícula de la niña, utilizando "criterios antojadizos y poco objetivos".
El establecimiento imparte clases desde kinder a cuarto medio pero, por razones de infraestructura, solo entrega formación en un curso por nivel en la educación secundaria, seleccionando desde los dos octavos básicos únicamente a 45 alumnos para la enseñanza media.
De acuerdo a los reglamentos, para seleccionar a los alumnos se consideran las siguientes ponderaciones: 50 por ciento por criterio pedagógico (notas); 30 por ciento por dimensión personal (comportamiento conductual y participación del alumno), y 20 por cientocriterio de compromiso de padres y apoderados.
En el caso recurrido, la niña -quien ha estado en el establecimiento desde kínder a octavo básico- se ubicó en el lugar 29 de su curso (desde donde fueron seleccionados 21 alumnos) y, según la Corte de Apelaciones, su calificación se vio seriamente influida por criterios subjetivos, ya que cumple plenamente con las exigencias pedagógicas al lograr el cuarto mejor promedio de notas de su curso.
