El presidenciable de Renovación Nacional (RN), Sebastián Piñera, restó importancia a la sesión especial de la Cámara de Diputados que analizará, ante la posibilidad de presuntas irregularidades, la compra de un paquete accionario de la línea aérea LAN, que ya controla el empresario.
La transacción ya es investigada por la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS) ante la sospecha de que el político utilizó información privilegiada para realizar la compra, pues la adquisición se concretó un día antes de conocerse el informe semestral de la empresa.
El documento arrojó positivos resultados, los que al otro día de la compra impulsaron al alza el valor de los títulos adquiridos por Piñera.
Al respecto, el presidenciable indicó que ni siquiera asistirá al Congreso pues, indicó, se trata de "maniobra de baja monta" que busca atacarlo en su condición de posible candidato.
"No, por supuesto que no voy mañana (miércoles), de hecho la Cámara de Diputados tiene facultad para fiscalizar a los organismos públicos. En consecuencia, como estoy con mi conciencia muy tranquila de que la operación fue absolutamente legítima, estoy seguro que lo que mañana se pretende es una maniobra política de baja monta", dijo Piñera.
El aspirante a La Moneda, que en enero de este 2006 perdió en segunda vuelta ante la actual Presidenta, Michelle Bachelet, indicó que "fui candidato presidencial, tal vez voy a volver a serlo, pero le pediría a los diputados de la Concertación que peleen con armas limpias".
En respuesta, el diputado del Partido Socialista (PS) Iván Paredes -uno de los impulsores de la sesión- sostuvo que "el señor Piñera no tiene nada que hacer en el Parlamento porque nadie lo ha invitado".
"Creo que el señor Piñera está respirando por la herida -explicó- porque lo único que estamos haciendo nosotros es pedirle al superintendente que explique como opera este sistema, por si es necesario hacerle modificaciones para mejorarlo".
Similar opinión expresó el senador Alberto Espina, quien esbozó una defensa en bloque de la derecha en la Cámara Baja y además lo proclamó a tres años de la elección.
"Y la guerra sucia consiste en mentir, difamar, faltar a la verdad, y utilizar la institucionalidad del Parlamento para intentar sacar provecho y ventaja electoral", dijo Espina.
"De manera de que nosotros sí estamos preparados y sabemos que esto es parte de la estrategia para intentar impedir, cosa que esta vez no va a ocurrir, que Sebastián sea el próximo presidente de Chile en cuatro años más", agregó el parlamentario por la Novena Región.
En tanto, el diputado de la Unión Demócrata Independiente (UDI) Marcelo Forni señaló que "nosotros no nos vamos a prestar para este juego. Hemos considerado siempre que la sesión es inconstitucional y lo vamos a sostener hasta el final".
Forni tomará la palabra este miércoles, al igual que los diputados RN Cristian y Nicolás Monckeberg.
El titular de la SVS, Alberto Echegaray de la Cerda, confirmó su asistencia a la sesión, a la que también está invitado el ministro de Hacienda, Andrés Velasco.
El negocio que alertó a la Superintendencia se realizó el lunes 24 de julio. Ese día, Piñera, a través de la Sociedad de Inversiones Santa Cecilia, compró un paquete de acciones de LAN por unos 10.000 millones de pesos, a un valor de 3.280 pesos el título.
La transacción llamó la atención del ente regulador pues se verificó 24 horas antes de que la empresa diera a conocer sus resultados del segundo trimestre, que arrojaron un alza en sus utilidades de 31 por ciento. (Cooperativa.cl)