Los familiares de los Presidentes de la República ya no tendrán acceso a actividades oficiales en sus giras internacionales, según el nuevo protocolo que regula estos viajes.
Cabe recordar que Sebastián Piñera encargó a Cancillería el "Protocolo de giras internacionales del Presidente de la República" al término de su viaje por Asia, que fue criticado por la participación de sus hijos Cristóbal y Sebastián en reuniones cerradas al público y que solo incluyeron parcialmente a la prensa.
El documento divide las delegaciones que, de ahora en adelante, viajarán en cuatro áreas: Presidente -junto a quien ejerza funciones de primera dama "o equivalente"; la comitiva oficial -funcionarios del Ejecutivo y parlamentarios, entre otros-; una comitiva de apoyo -asistencia médica y asesores de prensa- e invitados especiales.
En esta última categoría se incluye a representantes de órganos autónomos constitucionales y del sector privado, al igual que a medios de comunicación e "invitados adicionales", como por ejemplo, familiares del Presidente, cuyo número no tiene un límite determinado.
Sin embargo, sí impide su presencia en reuniones bilaterales o ampliadas, o en encuentros de trabajo con un jefe de Estado, pero se permita que asistan a "aquellas actividades que posean una naturaleza estrictamente protocolar o que sean abiertas al público y a los medios de comunicación".
Presidencia dijo a La Tercera que dichas actividades pueden ser ceremonias de bienvenida y cenas ofrecidas por autoridades locales en honor a los mandatarios visitantes, por lo que bajo este criterio, los hijos de Piñera no debieron participar de la polémica reunión con empresarios chinos, pues no fue una actividad totalmente abierta.
El protocolo también establece que podrán viajar en la nave de la Fuerza Aérea siempre y cuando haya disponibilidad, y ya se haya confirmado la asistencia de las demás comitivas e invitados. Una vez que lleguen a su destino, los familiares deben costear sus gastos de transporte y alojamiento, y no pueden recibir viáticos de ningún órgano del Estado.
El diputado miembro de la comisión de Relaciones Exteriores Issa Kort (UDI) valoró la nueva medida del Ejecutivo, pues según él "recoge un sentido político, diplomático e incluso familiar".
"De las crisis se construye criterio, y valoramos la rapidez y rectitud con que Cancillería hace una propuesta al Presidente de la República", señaló el parlamentario a El Mercurio.
Cómo programar las próximas giras
Por otro lado, el documento plantea los lineamientos para planificar las futuras giras del Presidente: Cancillería enviará a Presidencia cada noviembre una propuesta que consiste en un programa anual y calendarización de potenciales visitas para el siguiente año.
Dicha programación será revisada durante junio, aunque se podrán proponer y realizar giras en cualquier momento del año.
Cancillería también elaborará una nómina -sin incluir a familiares y la prensa- de quienes viajarán y deberá enviarla a Presidencia para su aprobación al menos 30 días antes de la gira. Si bien de su aprobación depende que se envíen las invitaciones, el Mandatario también puede extenderlas fuera del plazo.
