La autoridad regional reaccionó así a la denuncia de que volvieron los malos olores.
Los vecinos reclamaron porque consideran que el desalojo de la planta ha sido muy lento.
El intendente de Atacama, Rafael Prohens, afirmó que los dirigentes de Freirina solo buscan desacreditar al Gobierno con sus denuncias en torno a que volvieron los malos olores en la planta de Agrosuper y que el desalojo de los cerdos anunciado ha demorado mucho.
El fin de semana los habitantes del Valle del Huasco se tomaron nuevamente la carretera en protesta porque nuevamente estaban manando malos olores de la planta de Agrosuper y su vocera, Andrea Cisternas, denunció que el cierre de la planta no se había hecho efectivo y que se siguen inseminando cerdas en el lugar.
"Lo que lamentamos de esto es que lo que se pretende es que el Gobierno pierda credibilidad en un tema súper sensible para toda la comunidad, no solamente para un grupo de gente", expresó la autoridad regional.
Según Prohens, la comunidad ya dio por superada la crisis ambiental generada por Agrosuper: "Yo estuve el jueves en Freirina, me reuní con las juntas de vecinos, hablamos de todos los temas y ninguno de ellos tocó el tema de Agrosuper".
El ministro de Salud, Jaime Mañalich, reconoció este lunes que se había producido la filtración de una cañería que llevaba las deposiciones de los cerdos, pero advirtió que el problema ya se había solucionado.
Agrosuper aclaró que que el traslado de cerdos desde la planta hasta la zona central del país se realiza de manera diaria, que "todo este proceso se ha llevado a cabo en coordinación con la autoridad sanitaria y el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG)" y que se han gastado más de 3.000 millones de pesos en solucionar los problemas de la zona.
