Un enfrentamiento entre reclusos y gendarmes se vivió este jueves al interior de la Cárcel de Chillán, dejando a cuatro funcionarios de la institución con lesiones de diversa consideración.
El hecho se produjo en horas de la mañana, cuando los funcionarios realizaban el traslado de reos a los talleres de artesanía. En dichas circunstancias fueron atacados por la población penal: les lanzaron sillas, termos con agua caliente y otros elementos contundentes.
"Se vino la población penal encima"
"El incidente comenzó cuando un interno empezó a amenazar a un oficial que se encontraba en el patio, tras lo cual se procedió a sacarlo y se vino la población penal encima, iniciándose un enfrentamiento", relató Cristian Montecinos, presidente de la Asociación Nacional de Funcionarios Penitenciarios (Anfup) en Ñuble.
A raíz de esta situación, cuatro gendarmes resultaron heridos, debiendo ser trasladados a un recinto hospitalario para constatar la gravedad de sus lesiones.
Los más afectados fueron un funcionario que cayó al suelo y luego fue golpeado con pies y puños, otro que sufrió el impacto de una silla en su cabeza y uno que, preliminarmente sufrió la fractura de un dedo.
"Represalia"
"Creemos que esta agresión se originó como represalia a un registro preventivo y un operativo de incautación de drogas, que frustró su ingreso (de estupefacientes) el día anterior a través del método del pelotazo", agregó Montecinos.
El presidente local de Anfup señaló que este año han aumentado las agresiones a gendarmes y enfrentamientos con la población penal, motivo por el cual se exigirá a la autoridad de la institución que se haga un seguimiento de los casos.
