El gobierno boliviano impuso "candados" en el nuevo contrato que firmará el próximo 29 de junio con Argentina para evitar que este país le revenda a Chile el gas que le compra a Bolivia.
La información fue confirmada por el canciller David Choquehuanca, quien destacó que el contrato es con Argentina y el gas debe quedarse ahí.
"Ahora se están poniendo candados para evitar la venta de gas (boliviano) a Chile por parte de Argentina", dijo en tanto a una cadena de televisión el presidente de la empresa estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Jorge Alvarado.
Alvarado hizo esas declaraciones después de que el domingo pasado apareciera en el diario El Mercurio una entrevista al ministro de Relaciones Exteriores de la nación transandina, Alejandro Foxley, en la que pidió a las autoridades bolivianas no entorpecer con "elementos hostiles" el diálogo sin exclusiones que ambos países han definido.
Foxley basó este comentario en la negativa del Ejecutivo del presidente Evo Morales a permitir que Argentina bombeé a Chile parte del hidrocarburo que le compra.
La polémica sobre el uso que hace Buenos Aires del gas boliviano se reavivó en mayo pasado, cuando el gobernante argentino, Néstor Kirchner, aseguró que su país se lo revende a Chile y propuso que Santiago participe en las conversaciones sobre el precio del producto.
Alvarado recordó que el contrato vigente entre Bolivia y Argentina, suscrito en el 2004 y que vence a finales de año, establece límites a esta posibilidad, como impuso el entonces presidente boliviano, Carlos Mesa, que acuñó la famosa expresión "ni una molécula de gas a Chile".
El funcionario reiteró que en el que suscribirán Kirchner y Morales el 29 de junio en la capital argentina quedará todavía más acotado el asunto, aunque según los expertos es imposible controlar realmente lo que hace Argentina con el gas.
Sobre este convenio, el titular de YPFB señaló que "hay un consenso en lo que respecta al precio, los volúmenes y el tiempo" de duración del acuerdo, aunque prefirió no detallar lo pactado hasta ahora sobre estos puntos.
El último contacto se registró hace una semana con la visita a La Paz del ministro de Planificación Federal argentino, Julio De Vido.
Desde hace varias semanas Bolivia reclama a Argentina aumentar hasta por lo menos 5,5 dólares por millón de BTU (Unidad Térmica Británica) el precio del gas que le vende actualmente a una tarifa de 3,35 dólares.
Buenos Aires está dispuesta a pagar cinco dólares por millón de BTUl gas, del cual recibe actualmente un volumen próximo a los 5,5 millones de metros cúbicos diarios, aunque el contrato fija un máximo de siete millones.
Por último, Alvarado anunció que Brasil ha recibido la notificación de las autoridades bolivianas para discutir una revisión del precio del gas que le vende en una cantidad de aproximadamente 26 millones de metros cúbicos diarios y a una tarifa de 3,40 dólares por millón de BTU.
Según el funcionario, Brasilia ha propuesto que la reunión se realice esta semana pero La Paz ha sugerido que se lleve a cabo en los días posteriores por un problema de agenda.
Los directivos de la brasileña Petrobras se niegan a pagar más por el gas natural y esperaban la notificación boliviana, porque la misma da un plazo de 45 días para que las partes se pongan de acuerdo o, de lo contrario, el contencioso deberá resolverlo un tribunal de arbitraje internacional, donde creen tener las de ganar.
Sobre la polémica del viaje de parlamentarios chilenos a La Paz, donde manifestaron su posición a favor de que Bolivia encuentre una solución a su demanda marítima, el presidente de la Comisión de RE.EE. del Senado boliviano, Guido Guardia, afirmó que el encuentro de legisladores programado para el 29 de julio en Santa Cruz no se ha visto afectado.
Además cuestionó los celos políticos a la visita que encabezó el senador radical Nelson Avila: "Me parece que está muy exagerada esa reacción, porque resulta que nosotros queremos conversar con todo aquel chileno que visite Bolivia. De repente hay celos entre parlamentarios y políticos, como los hay también acá. Pero no es tan grave el asunto"
Para las próximas horas se espera desde Chile si se mantiene la reunión o si es suspendida. (EFE/Cooperativa.cl)