El senador de la UDI, Hernán Larraín, se mostró partidario de llamar a informar al embajador de Chile en Perú, Fabio Vío, ante el impasse diplomático causado por las palabras antichilenas del general del Ejército Edwin Donayre.
"No creo que haya que romper las relaciones pero se van a ver tensionadas, debilitadas", afirmó Larraín, agregando que "a estas alturas no hay otro camino" que llamar a informar.
"Tenemos que usar todos los recursos diplomáticos para que, manteniendo las relaciones, demos la señal al Perú y al pueblo peruano de que las ofensas en Chile no se aceptan", recalcó.
El también integrante de la comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara Alta fustigó la actitud de Alan García, quien aseguró que el general pasaría a retiro tras sus dichos, pero pasan los días y "no avanza en esa línea", lo que da cuenta del "mal espíritu" del llamado.
"Después de haber reiterado estos hechos, si el presidente del Perú no llama a retiro, no destituye al general Donayre, simplemente se está haciendo cómplice de sus palabras y eso sí que es grave", afirmó, agregando que esto es "una ofensa para el pueblo chileno".
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| Larraín señaló que en la actitud de García "hay un mal espíritu". (Foto: UPI) |
"Lo que ha hecho el presidente peruano no es aceptable, no se compadece con la dignidad con que se trata a una jefa de Estado (...), espero que tenga la hombría de rectificar ahora sus actuaciones destituyendo de una al señor Donayre y dándole explicaciones públicas a Chile", solicitó Larraín.
En conversación con El Diario de Cooperativa, el senador aseguró que la reiteración de las críticas hechas por el general Edwin Donayre el fin de semana "evidencia que este no es un problema de intemperancia o del alcohol", sino que "hay un pensamiento antichileno muy brutal que está en sus palabras y eso hace más urgente la necesidad de que el Gobierno peruano tome medidas".
Si estos dichos no tienen una sanción, afirmó, "va a quedar como una mancha que va a dificultar las relaciones entre Chile y Perú por mucho tiempo, (que) desacredita la institucionalidad del Perú, que no es capaz de reaccionar a la altura de las circunstancias".