A nueve años del 27F, el segundo terremoto más potente en la historia de Chile

Publicado:
Autor: Cooperativa.cl

A las 3:34 de la madrugada del 27 de febrero de 2010, un fuerte sismo 8,8 sacudió el centro y sur del país, provocando un devastador tsunami.

La catástrofe dejó un saldo de 523 muertos, 24 desaparecidos y más de 800 mil damnificados.

El megaterremoto es considerado como el octavo más fuerte registrado por la humanidad.

A nueve años del 27F, el segundo terremoto más potente en la historia de Chile
Llévatelo:

A las 3:34 de la madrugada del 27 de febrero de 2010, en el año del Bicentenario, un violento sismo sacudió una amplia zona geográfica de nuestro país. El megaterremoto y posterior tsunami, que hoy miércoles cumplen nueve años, formaron la peor catástrofe natural que ha sufrido Chile desde 1960: el 27-F. 

Con epicentro en la costa sur del Maule, frente a Cobquecura, el terremoto, con una magnitud de 8,8 en la escala Richter, azotó la zona central y sur, dejando un saldo de 523 muertos, 24 desaparecidos y más de 800 mil damnificados.

De acuerdo al Centro Sismológico Nacional (CSN), el origen del sismo estuvo en un desplazamiento de la placa de Nazca bajo la Sudamericana y es considerado como el segundo más fuerte en la historia del país y el octavo más fuerte registrado por la humanidad.

El terremoto fue 31 veces más fuerte y liberó cerca de 178 veces más energía que el devastador terremoto de Haití ocurrido el mes anterior, y la energía liberada es cercana a 800 mil bombas atómicas, como la liberada en Hiroshima en 1945.

El tsunami también afectó a la isla Robinson Crusoe, en el archipiélago Juan Fernández, a Chanco -donde murieron 41 personas- Curanipe, Pelluhue, Cauquenes y Constitución, la ciudad más importante de la costa sur del Maule, donde más de 100 personas murieron y centenares desaparecieron.

En total, más de 300 personas fallecieron en la Región del Maule.

En la Región del Biobío, hubo daños en infraestructura -puentes y caminos- en la capital penquista así como un grave incendio en la Universidad de Concepción. En Talcahuano, en tanto, el tsunami produjo severos perjuicios en los astilleros de Asmar y la base naval, y también en edificios comerciales y viviendas.

En la costa regional la catástrofe significó la destrucción casi total de Dichato, Tirúa, Lota y Coronel dejando también en mal estado a ciudades del interior del país como Chillán, Curicó y Talca.

En la Región de O'Higgins, 130 mil personas quedaron sin vivienda, mientras que en la Metropolitana hubo 38 fallecidos, siendo el casco histórico de la ciudad de Santiago lo más afectado, principalmente el barrio Brasil y el barrio Yungay.

El terremoto también provocó importantes problemas en la seguridad pública, específicamente por saqueos al comercio, sobre todo en Concepción, por lo que, al día siguiente del desastre, la entonces presidenta Michelle Bachelet decretó "estado de excepción constitucional de catástrofe" para el Maule y el Biobío, lo que significaba la entrada de los militares para restablecer el orden.

También se estableció un toque de queda, medida que no se decretaba desde la dictadura militar finalizada en 1990.

Pese a ello, se produjo un debate público respecto a la capacidad de reacción del gobierno, pero también de los organismos involucrados directamente en este tipo de emergencias, como la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi) y el Servicio Hidrográfico y Oceánico de la Armada de Chile (Shoa).

Respecto de la fallida alerta de tsunami, que dejó 104 muertos, seis personas fueron imputadas: el ex subsecretario del Interior Patricio Rosende; la ex directora de la Onemi Carmen Fernández; el ex jefe de turno Johazziel Jamett; el director del SHOA Mariano Rojas; y sus asesores Andrés Enríquez y Mario Andina.

Ninguno de los imputados fue condenado, debido a que la Corte de Apelaciones, en abril del 2016, determinó la suspensión condicional del proceso, por lo que debieron pagar una indemnización de 235 millones de pesos en tres cuotas a los familiares de las víctimas del tsunami.

El jueves 11 de marzo, a casi dos semanas de ocurrido el terremoto principal, un fuerte movimiento sísmico de magnitud 6,9 se sintió a las 11:39 horas en el sector central de Chile, abarcando prácticamente las mismas zonas afectadas por el 27-F.

Ese día y a esa misma hora se estaba efectuando la Ceremonia del Cambio de Mando en el Congreso Nacional, en que la saliente mandataria Michelle Bachelet entregaba la banda presidencial, por primera vez, a Sebastián Piñera.

LEER ARTICULO COMPLETO

Suscríbete a nuestro newsletter