Habitantes de la villa San Joaquín no tienen suministro eléctrico desde el terremoto.
Piden a la alcaldía un albergue porque acusan que sus casas tienen daños.
Pese a que casi en toda la Región Metropolitana ha retornado el suministro eléctrico, en sectores Pedro Aguirre Cerda, como en la villa San Joaquín mantiene un clima de tensión e inseguridad entre los vecinos.
Según el relato de pobladores del lugar, deben dormir a la intemperie para evitar que desconocidos ingresen a sus departamentos.
"Desde el sábado en la mañana estamos pidiéndole a la alcaldesa (Claudina Núñez) que abra un colegio que está a menos de una cuadra de nuestros edificios para poder albergar a nuestras mujeres, a nuestros hijos, sobrinos y adultos mayores, pero se niegan porque la prioridad la tiene el inicio de clases", señaló uno de los habitantes de la citada villa.
"En la noche tenemos que lidiar con posibles delincuentes que rondan y rondan los edificios", añadió.
Además acusaron que sus viviendas presentan daños estructurales y que desde la municipalidad sólo les han dicho que no es así y que no necesitan albergues.
