La ministra Secretaria General de Gobierno, Paula Narváez, afirmó que el Ejecutivo no comparte la visión de llamado "Bus de la libertad" que recorrerá Santiago y Valparaíso con mensajes transfóbicos para denunciar el "adoctrinamiento LGTB en las escuelas", pero reconoció que existe libertad de expresión.
La máquina, de la organización española Citizen GO, llega a Chile el próximo lunes 10 de julio y está decorado con la frase: "¡Dejen a los niños en paz!" y "Los niños tienen pene. Las niñas tienen vulva. Que no te engañen", las consignas aluden a las medidas implementadas por distintos gobiernos en favor de niños homosexuales y transexuales en los colegios.
Ante su llegada al país, la ministra vocera de Gobierno manifestó que "iniciativas que son contrarias a esta visión de derechos humanos de la diversidad, de derechos ciudadanos de la diversidad, nosotros no la compartimos".
"Sin embargo, entendemos también que existe la libertad para expresar distintas opiniones en una sociedad democrática", reconoció.
Por este motivo, la secretaria de Estado dijo que "el llamado que hacemos es a que este tipo de actividades no promuevan el odio y la intolerancia".
Iguales reunirá firmas
Por su parte, en Fundación Iguales buscarán firmas online para que el Gobierno rechace la llegada del bus, según indicó su presidente Juan Enrique Pi.
"Cuesta entender que existan grupos que quieren perpetuar la discriminación a los estudiantes en razón de su orientación sexual o su identidad de género. Las tasas de deserción, asimismo como las tasas de suicidio de las personas gay, bisexuales y, especialmente, de las personas trans, son alarmantes", aseguró.
Mientras que el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh) lleva una campaña similar buscando impedir la circulación de este bus, afirmando que ya tienen "más de 25 mil firmas".
Diputada Cariola: Bus es una incitación al odio
A través de su cuenta de Twitter se manifestó esta mañana la diputada comunista Karol Cariola:
El polémico bus se financia mediante crowdfounding y cuenta con el auspicio de organizaciones locales como "Padres Objetores" y el Observatorio Legislativo Cristiano.
