La ministra del Servicio Nacional de la Mujer, Laura Albornoz, hizo un llamado a las mujeres a denunciar cualquier signo de violencia que se perciba al interior de sus relaciones de pareja, tras el caso del hombre que dio muerte a su conviviente de un disparo en la cara, en la comuna de Conchalí.
En El Diario de Cooperativa, la ministra sostuvo que generalmente en estos casos se esgrimen argumentos como los efectos del alcohol y la droga para justificar acciones violentas, pero el trasfondo es la diferencia de poder que existe entre hombres y mujeres.
"Existe la convicción que los hombres pueden hacer respecto de las mujeres lo que a ellos les parezca conveniente", sostuvo Albornoz. "Sea que haya bebido o que haya consumido droga siempre hay una razón o una justificación para ejercer un poder o considerar a la mujer parte del dominio de la propiedad del hombre".
A juicio de la autoridad son las mujeres las que tienen que avanzar para "empoderarse" de sus derechos y denunciar estas situaciones, entendiendo que no está bien que el marido o su pareja las golpee.
Agregó que el Servicio ha detectado una fuerte presencia de relaciones violentas en las parejas de pololos. Por eso, aconsejó denunciar ante cualquier señal que suponga que el hombre quiere controlar la vida de la mujer.
"Controlar los permisos, las visitas de ciertos parientes a la casa, controlar la vestimenta que utiliza o los gustos que tiene son señales en las cuales se puede detectar una conducta del hombre a la mujer que pretende dominar todos los aspectos de su vida". Este es un tipo de violencia, indicó, que perciben cuatro de cada cinco mujeres y que no necesariamente se traduce en golpes.
También es necesario que la sociedad se involucre en estas situaciones y los vecinos, por ejemplo, denuncien a Carabineros estos casos, para evitar futuras muertes.
El Sernam tiene 29 centros a lo largo del país en los cuales se atiende y orienta a las mujeres víctimas de violencia intrafamiliar o de género.
Además, la ministra indicó que el Servicio tiene programado avanzar en una propuesta de casas de acogida para permitir que las mujeres que han sufrido casos graves de violencia puedan resguardarse de posibles amenazas que atenten contra su vida. (Cooperativa.cl)