La UE pretende amortizar las pérdidas de los grupos y solistas cuyos derechos de autor se ven violentados por el intercambio de archivos en línea.
Frente a las descargas masivas de música o videos por internet y a la proliferación de técnicas para generar copias, la Unión Europea (UE) estudia la manera de compensar a los artistas, quienes reciben cada vez menos ingresos debido a la "piratería".
A principios de 2008, la Comisión Europea (CE) propuso extender la vigencia de los derechos de autor para los intérpretes de los 50 años actuales a 95, generando un encendido debate en torno a los cánones sobre la copia privada.
"Es hora de que las partes se hablen directamente", señaló Charlie McCreevy, comisario para el Mercado Interior, quien propuso crear un "foro" de debate entre industriales, organismos recaudadores, artistas y consumidores.
Los fabricantes de aparatos electrónicos denuncian hace años la competencia desigual, pero los organismos encargados de los derechos de autor y de la recaudación de tasas rechazan dejar escapar recursos avaluados en 16 países de la UE en 2006 en unos 558 millones de euros.
Una historia por cambiar
En los años 60, un canon o gravamen sobre la "copia privada" se sumó a los derechos existentes para compensar la caída de las ventas de discos.
Actualmente, esta tasa se aplica a CD, DVD, computadores, lectores de MP3 y fotocopiadoras, entre otros aparatos.
Los cánones sobre la copia privada pueden representar hasta el cinco por ciento de los ingresos de los artistas musicales o teatrales, según varias estimaciones.
Tras una reforma frustrada a fines de 2006, la CE se prepara para volver a la carga, aprovechando que ahora la industria parece menos reacia a ceder ante los artistas.
"Reconocemos la legitimidad del principio de remuneración de los artistas, pero el sistema es erróneo", indicó Mark MacGann, representante del sector europeo informático y de telecomunicaciones.
Para el personero es factible un acuerdo "en los próximos seis meses sobre la mejora del sistema existente"; mientras no se descarta armonizar el cálculo de las tasas o aplicarlas sobre una gama más extensa de productos a un índice inferior. (Agencias)
