El siete veces campeón mundial de la Fórmula 1 señaló que mantiene la pasión por el automovilismo, y que seguirá tratando de obtener nuevos títulos en el circuito.
El piloto alemán Michael Schumacher, vigente campeón mundial de Fórmula 1 como representante de Ferrari, afirmó este jueves que aún no logra visualizar el término de su carrera en la máxima competencia del automovilismo.
"Desde hace años se me pregunta cuánto tiempo permaneceré aún piloteando, y siempre respondo lo mismo, que no veo el final. Lo siento", declaró Schumacher, que se encuentra en la estación invernal de Madonna di Campiglio (Arezzo, Italia) en el tradicional encuentro anual de Ferrari con la prensa especializada.
Schumacher no sólo indicó que su presencia en el circuito está asegurada, sino que incluso se declaró aún más interesado que antes en seguir compitiendo.
"Tengo la intención de no firmar contratos largos. Pero sí puedo garantizar que ahora estoy más enamorado de este deporte que cuando comencé. Antes tenía una relación odio-amor, actualmente hay mucho más de amor", aseveró.
El siete veces campeón mundial de Fórmula 1 se declaró conforme con su actual momento deportivo y descartó referirse a quién podría ser su sucesor en la competencia.
"No me interesan comparaciones con pilotos del pasado, ni tampoco indicar a mi posible heredero. Creo que en este deporte cada uno debe ser uno mismo. Yo soy Michael Schumacher, tengo un contrato con Ferrari hasta finales de 2006, y tengo la intención de respetarlo", sostuvo.
En relación con las novedades que en 2005 presentará la Fórmula 1, el germano se mostró a favor de que se reduzcan los gastos, al igual que en otros deportes.
"La economía mundial no es tan positiva como en el pasado, pero esto vale también para otros deportes, como el fútbol. Se trata sólo de encontrar el justo punto de equilibrio, pero una cosa es cierta, si hay menos dinero se debe gastar menos", indicó.
"En verdad, tener sólo un juego de neumáticos para la carrera es la novedad más importante, pero no lo es si a mí me gusta o no, lo importante es que las reglas sean iguales para todos", agregó.
Schmacher se manifestó optimista sobre el nuevo modelo de Ferrari para 2005, el que, según indicó, "será presentado oficialmente a fines de febrero próximo, para verlo ya en carrera, quizás, en Barcelona".
Finalmente, el siete veces campeón mundial indicó a Mercedes y BMW como sus potenciales rivales para la temporada, junto con minimizar las opciones de su hermano Ralf al mando de un Toyota: "Tienen ingredientes para crecer, para él es una óptima ocasión, pero es un poco pronto para esperar que ganen el mundial", puntualizó. (EFE)
