Revise la trastienda de la jornada inaugural en Buenos Aires.
Lea y comente el blog del enviado especial de Al Aire Libre en Cooperativa al rally más duro del mundo.
¡Señor!, no haga caso a la llovizna, no va llover. Esa fue la tajante aseveración de un regordete taxista en la desierta Buenos Aires en la mañana de año nuevo, error. A los pocos minutos el viento y la lluvia se apoderaron del centro de la ciudad, presuroso busqué un vendedor de paraguas, que tal como en Santiago, aparecen de la nada apenas caen dos gotas de agua. Son 20 pesos hermano -unos 2500 chilenos-. No era barato, pero los pagué antes de mojarme. Aún me quedan más de 15 días de Dakar, no era el momento para enfermarse. Pero casi ni lo usé, de milagro paró de llover para siempre.
