El tenista escocés reconoció que se encuentra cerca del objetivo en Melbourne.
De paso, dejó entrever cierta ventaja de Novak Djokovic para la final del domingo
El británico Andy Murray, que disputará el título del Abierto de Australia ante el serbio Novak Djokovic, se mostró esperanzado en inaugurar su cosecha de éxitos en un Grand Slam y reconoció que prefiere jugar una final sin que estén como rivales el español Rafael Nadal o el suizo Roger Federer.
"La gente pensaba que el torneo sería mejor si Roger Federer y Rafael Nadal estaban en la final y no yo. Pero eso no me preocupa. Yo estoy en la final. Ambos han sido muy buenos para el deporte y creo que lo seguirán siendo durante los próximos años. Pero desde mi punto de vista, prefiero estar yo en la final y que Roger y Rafa estén en su casa viéndola por la tele", dijo el escocés, que superó en semifinales a David Ferrer.
"Fue un partido muy duro en el que pudo ganar cualquiera. Tuve que cambiar mi táctica y jugar más cerca de la línea a partir del segundo set", explicó Murray, que subrayó el talento del español.
El tenista escocés reconoció que se encuentra cerca del objetivo en Melbourne.
"Esto es algo histórico. Algo por lo que siempre soñé desde niño. Una meta personal. Y tendré que manejar esta situación. Quiero tratar de ganar", apuntó.
"Pero tampoco quiero cargarme más presión y pensar que ningún británico, desde Fred Perry, ha ganado aquí. Más de 70 años. Intentaré sacar el máximo de la experiencia. Aprovechar la oportunidad. Asegurarme de que estoy tranquilo en la cancha", explicó Murray.
Sobre la final, el tenista escocés dejó entrever cierta ventaja del serbio por disponer de un día más de descanso para la final del domingo.
"Creo que, pero eso no es una excusa, sí que influye. Pero hay tiempo suficiente. En el Abierto de Estados Unidos eso no es así. Jugaría en 13 o 14 horas. Aquí hay más tiempo. Espero estar bien físicamente. Aunque lo ideal sería que todos tuvieran el mismo tiempo", concluyó.
