Fernando González tuvo que dejar todo en la cancha para seguir con vida en Melbourne

Un triunfo con ribetes épicos consiguió Fernando González (11º de la ATP) en la tercera ronda del Abierto de Australia. El chileno se impuso al kazajo Evgeny Korolev (53º) por 6-7 (5), 6-3, 1-6, 6-3 y 6-4 después de tres horas y 24 minutos llenos de drama y buen tenis.

El encuentro mostró a dos jugadores empecinados en conectar tiros ganadores, pero la mayor experiencia del chileno fue el factor clave que le permitió sacar el boleto a octavos de final, donde tendrá que enfrentar al estadounidense Andy Roddick (7º), que doblegó al español Feliciano Lopez (46º) por 6-7 (4), 6-4, 6-4 y 7-6 (3).

El primer set en el Court 2 del Melbourne Park fue de gran factura, con ambos tenistas demostrando una variada gama de golpes potentes. González consiguió romper el saque de su rival en el tercer juego, pero el europeo recuperó el quiebre y forzó el desempate, el cual ganó por un estrecho 7-5.

Korolev bajó la intensidad en el comienzo del segundo parcial, lo que le permitió al oriundo de La Reina conseguir la paridad en el marcador. Sin embargo, el nivel del cotejo era de gran factura, ya que el kazajo no perdonaba con su demoledor revés paralelo desde el fondo de la cancha, mientras el nacional mostraba gran solidez con su primer servicio.

González ya está entre los 16 mejores del Abierto de Australia (Foto: EFE)

El tercer parcial fue un monólogo a favor del jugador de Kazajstán, que se impuso por 6-1 al combinar un potente saque con su ya conocida estrategia de intentar tiros ganadores desde todos los ángulos de la cancha.

González apretó el acelerador en la cuarta manga, aprovechando que Korolev comenzaba a sufrir calambres en sus piernas. El chileno sólo necesitó un tempranero rompimiento para llevarse el capítulo por 6-3.

El set definitivo fue de trámite similar: González consiguió quebrar el saque de su rival en el tercer game y a partir de ese momento dosificó sus energías, ya que se concentró en mantener la diferencia, sin amenazar el servicio del europeo.

Apoyándose en sus 20 aces, el número 11 del mundo no cedió su saque en los últimos dos parciales y consiguió un excelente triunfo frente a un rival que mostró un muy buen nivel durante casi todo el encuentro.

Con esto el chileno igualó lo logrado en Melbourne en 2009, donde cayó en octavos de final ante el español Rafael Nadal (2º). Ahora el desafío también será complicado, ya que enfrenta a un Roddick que lo ha derrotado en ocho de los 11 partidos disputados entre ambos. Además, González deberá combatir dolencias en sus rodillas.

En el último choque, en octavos de final del US Open 2008, el norteamericano se impuso por 6-2, 6-4 y 6-1.