PIB creció 2,9 por ciento en el tercer trimestre del año
El bajo desempeño de la economía, que confirma una tendencia decreciente en 2006, estuvo marcado por la caída de la producción minera, pesquera e industrial.
El bajo desempeño de la economía, que confirma una tendencia decreciente en 2006, estuvo marcado por la caída de la producción minera, pesquera e industrial.
La economía chilena creció sólo 2,9 por ciento en el tercer trimestre de este año, en comparación con igual período de 2005, a raíz de las caídas en las producciones de la minería, la pesca y la industria, informó el Banco Central.
La cifra, la más baja desde 2003, implica que el crecimiento acumulado en el presente año suma 4,1 por ciento.
Al mismo tiempo, el emisor corrigió a la baja, en una décima en cada caso, la evolución del Producto Interno Bruto (PIB) en el primer y segundo trimestre de 2006, que de este modo quedaron en 5,2 y 4,4 por ciento, respectivamente.
En el tercer trimestre de este año, la demanda interna creció en 3,9 por ciento, impulsada principalmente por el consumo privado, que alcanzó una expansión del 6,9 por ciento.
El consumo del Gobierno, en tanto, anotó una subida del 3,8 por ciento, mientras la acumulación de inventarios se situó en el 1,5 por ciento del PIB.
Las exportaciones de bienes y servicios crecieron el 7,3 por ciento interanual, destacando los envíos de químicos, combustibles, caucho y plástico, minerales no metálicos, productos de metálica básica, vestuario, cuero y calzado.
Las importaciones, en tanto, se expandieron 8,9 por ciento, impulsadas por las importaciones de bienes (9,4 por ciento).
Además, el ahorro total alcanzó en el trimestre 19,3 por ciento del PIB.
Por sectores, la pesca anotó una caída del 6,5 por ciento, determinada por una disminución de la pesca extractiva, que no alcanzó a ser compensada por un leve crecimiento de los centros de cultivo.
La minería, por su parte, retrocedió el 3,7 por ciento, que refleja una contracción del 4,5 por ciento del cobre, el principal producto del país, debido bajas en la producción causadas por un accidente en Chuquicamata y una huelga en Escondida.
La industria manufacturera anotó una caída del uno por ciento, explicada por el bajo desempeño de las áreas de productos metálicos, maquinaria y equipos, textiles, cuero y calzado, principalmente.
La caída fue atenuada por el positivo comportamiento de la industria alimenticia, bebidas y tabaco, maderas y muebles.
En el lado positivo del cuadro, el sector comunicaciones creció 11,4 por ciento, impulsado principalmente por la telefonía móvil y, en menor medida, por la telefonía de larga distancia y correos privados.
El comercio creció 5,2 por ciento, influido principalmente por las ventas de las grandes tiendas y del mercado automotor, mientras el transporte se expandió 3,8 por ciento, con un alza general de todos los subsectores.
Por su parte, la construcción creció 3,2 por ciento y energía (electricidad, gas y agua) tres por ciento, determinado principalmente por la actividad eléctrica.
La agricultura, por su parte, creció 2,2 por ciento, con avances en los sectores pecuario y silvícola y retrocesos en las actividades frutícolas y agrícolas. (EFE)