Actriz contó que le dio la espalda a la religión, que tiene "una visión muy limitada".
Protagonista de "El diablo diste a la moda" explicó que ahora, en temas de religión, "soy... nada".
La actriz Anne Hathaway, que creció en una familia tan católica que su aspiración de niña era convertirse en monja, confesó que la homosexualidad de su hermano hizo que todos se alejaran del catolicismo.
"¿Cómo vamos a apoyar a una organización que tiene una visión tan limitada de mi querido hermano?", se pregunta la joven actriz, que en estos días promociona la película "Valentine's day", que en Chile se estrena este jueves.
"Toda la familia nos convertimos a la iglesia episcopal cuando mi hermano salió del armario", relata Hathaway, que, sin embargo, tampoco se sintió cómoda con su nueva religión, la versión estadounidense del anglicanismo.
Ahora, no siendo católica ni protestante, la actriz de 25 años tiene una mejor forma de describirse: "Soy... nada", declara. "Soy un trabajo en progreso".
