Nikita Mijalkov cierra la trilogía sobre la Rusia bajo Stalin con "Ciudadela"
La cinta es la segunda parte de la estrenada hace un año "Quemados por el sol 2".
El director se llevó un Oscar y una Palma de Oro con la primera parte de la cinta.
La cinta es la segunda parte de la estrenada hace un año "Quemados por el sol 2".
El director se llevó un Oscar y una Palma de Oro con la primera parte de la cinta.
El cineasta ruso Nikita Mijalkov estrenará este jueves la película "Ciudadela", con la que cierra su trilogía sobre la historia de este país bajo el dictador soviético Joseph Stalin, que comenzó en 1994 con la ganadora del Oscar "Quemados por el sol".
"Son ocho años de trabajo en el que tomaron parte más de 500 personas. Las condiciones del rodaje fueron durísimas", dijo Mijalkov, citado por las agencias rusas, en alusión a las espectaculares escenas de la Segunda Guerra Mundial rodadas por centenares de extras.
"Ciudadela", que es la segunda parte de la estrenada hace un año "Quemados por el sol 2", fue presentada a la prensa en vísperas de las celebraciones con ocasión del 66 aniversario de la victoria rusa sobre la Alemania nazi que se celebra el 9 de mayo.
"Pronto se la enseñaré a Vladímir Vladímirovich (patronímico del primer ministro ruso Putin)", dijo Mijalkov, quien es muy criticado por sus colegas y por la oposición tanto por sentar cátedra sobre la historia rusa como por propagar el ideario del Kremlin en sus filmes.
Mijalkov, que se llevó un Oscar y una Palma de Oro en Cannes en 1994 por "Quemados por el sol" que se centra en las purgas estalinistas, es de nuevo el protagonista de esta película bélica, en la que interpreta al oficial Kótov.
El espía del NKVD (precursor del KGB), quien traiciona a Kótov, es el actor fetiche del cineasta, Oleg Ménshikov, mientras Maxím Sujánov interpreta al dictador soviético Yosif Stalin.
Por el momento, se desconoce la suerte que correrá Kótov, que ya parecía haber muerto en la primera parte víctima de las purgas, pero la prensa ya ha filtrado que la película concluye con la marcha de los tanques rusos hacia Berlín.
"Sentí la necesidad de rodar una secuela tras ver 'Salvar al soldado Ryan' de Steven Spielberg. Me sentí herido por la historia según la cual la victoria en la guerra pertenecía a los aliados", afirmó Mijalkov.