Journey, Stefan Kramer y Sinergia coincidieron en la segunda jornada festivalera con presentaciones de calidad y que dejaron satisfechos a todos los asistentes.
Por J. Raúl Martínez, enviado especial a Viña del Mar
Aún quedan cuatro jornadas de Viña 2008, pero la segunda noche del Festival se perfila como una de las mejores de esta versión del certamen, y por qué no, como una de las más notables en los últimos años.
Con un inicio cargado de rock melódico con Journey, un intermedio digno de un café concert con Stefan Kramer y el cierre con el humor hecho música de Sinergia, la Quinta Vergara quedó más que satisfecha.
Los estadounidenses debutaron en Chile, pero también con ellos lo hacía su nuevo vocalista, Arnel Pineda, y el filipino se deshizo rápidamente de cualquier mote de imitador de Steve Perry, el más emblemático cantante, mas no el original, de los creadores de "Lights".
Además de tener un excelente registro para lo que es Journey, Pineda es un buen frontman, que contagia con su energía al público, aunque anoche en la Ciudad Jardín los seguidores de la banda no necesitaban mucho para "prenderse" más de lo que desde temprana hora demostraban.
Pero el paso de "Any way you want it" y varios otros clásicos no sólo marcó el debut vocal de Pineda, sino que también la posibilidad de los chilenos de ver en acción a personajes ilustres como el guitarrista Neil Schon y el maestro de la percusión Dean Castronovo.
Kramer y Sinergia, la armada nacional
Lo de Stefan Kramer resultó simplemente deslumbrante, el comediante se paseó por una treintena de personajes en más de una hora de actuación, en la que además de exhibir la capacidad de observación sobre la cual construye sus imitaciones mostró una faceta vocal impresionante.
Haciendo humor como Sebastián Piñera, Sergio Lagos, Nicolás Massú o Diana Bolocco, Kramer sacó constantes carcajadas de una audiencia que ya lo conocía por su trabajo en televisión y que entendió perfectamente los tiempos que usa el comediante.
Con Sinergia fue algo similar, público desde antes cautivo -principalmente jóvenes- y ganas de pasar un buen momento, el que se extendió hasta las 03:30 horas para quienes acompañaron la última nota de los de Conchalí.
Se trata de rock, bastante radial por cierto y con poco de metal, a pesar de su autodefinición, y con letras que sacan más de una sonrisa -como "Mujer robusta" o "Sopaipillas con mostaza"-; y que también hizo un giño histórico con versiones de Los Jaivas, Los Peores de Chile y Aparato Raro.
Antorchas plateadas y doradas, más Gaviota de Plata, para Journey, Kramer y Sinergia, nueve premios para un noche que debe haber dejado satisfecho a todo el público que vio exactamente lo que esperaba. (Cooperativa.cl)
