La mexicana ofreció un espectáculo en el quedaron patentes sus cualidades vocales intactas y el cariño reciproco de parte de la artista y sus seguidores.
Por Gonzalo Rodríguez gonzalor@cooperativa.cl
El Arena Santiago fue el escenario perfecto para el ansiado reencuentro de Ana Gabriel con sus seguidores chilenos, un recinto que se vio colmado de público -cerca de nueve mil espectadores sentados- y con un sonido acorde a la calidad de la artista mexicana, quien demostró que sus cualidades vocales e interpretativas siguen intactas.
La cantante azteca puso en escena un repertorio de 40 canciones en tres horas de un show en el que dejó en claro el cariño y respeto que siente hacia sus fans, y a su vez la idolatría que es capaz de despertar entre sus seguidores.
Desde el inicio del recital Ana Gabriel logró una empatía creciente con los asistentes a la velada, quienes le fueron haciendo llegar desde banderas chilenas, flores, gorros y hasta peluches.
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Ella se iba a acomodando a la situación y por ejemplo no dudó en calzarse un jockey con los colores y la leyenda "Chile". En esta primera parte de su concierto la artista azteca -acompañada de nueve músicos y tres coristas- recurrió a un repertorio en el que se contaron temas como "Evidencias", "Pecado original", "Tu nombre es traición" y "Huelo a soledad", ésta última interpretada a capella.
Sus constantes guiños a Chile, merced a los cambios de letras de algunas de sus canciones fueron una muestra de lo agradecida que estaba de las muestras afectivas que había sido objeto desde su llegada al país.
No contenta con ello recurrió a las palabras: "Buenas noches Chile. Estoy muy feliz, contenta por esta oportunidad que tengo, después de varios años de no poder estar con ustedes", señaló la cantante que ha pisado la Quinta Vergara en 1992 y 1995.
Frente a los gritos de "ídola" que se dejaron caer desde todos lados del recinto, ella indicó a los presentes que más que ello, prefería sentirse "amada, cómplice y amiga de Chile", o como una mujer que narra de historias de amor y desamor.
Cuando ya había transcurrido cerca de una hora, una banda de mariachis chilenos -Calicanto- se sumó al espectáculo, con interpretó canciones como "Ahora", "Me equivoqué contigo" y "México lindo y querido", entre otras.
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A estas alturas la gente quería estar lo más cerca posible de la artista e inmortalizar el momento, pero la seguridad del recinto trataba de evitar a toda costa poner a tajo a los flashazos del público.
En ese momento Ana Gabriel intercedió a favor de sus fans y exclamó que si bien entendía perfectamente la tarea asignada a los guardias, ella no tenía ningún problema en ser fotografiada, porque instantes como ese eran momentos preciados en la vida de las personas.
Dicho y hecho: un mar de gente enfiló hacia el escenario y cámara en mano, o recurriendo a sus celulares inmortalizó a su artista.
Para el final de la jornada la baladista, ya sin la presencia de los mariachis, se dio el lujo mostrar una versión reggaetón de "Hice bien quererte", además de cantar hits como "Quien como tú", "Luna", "Simplemente amigos" y "Cosas del amor". (Cooperativa.cl)
